Brasil estaría dispuesto a facilitar «este mes» la liberación de dos militares colombianos secuestrados por la guerrilla de las FARC, señaló en las últimas horas la senadora liberal Piedad Córdoba, quien trabaja como mediadora en las liberaciones.
«Estamos ya arrancando esa propuesta de liberación (del sargento Pablo Moncayo y el soldado Livio Calvo) y desmentimos las versiones de que Brasil no es el país que pueda hacer la mediación. Todo lo contrario, puede ser Brasil sin ningún problema», dijo Córdoba a la prensa.
Añadió que «el gobierno brasileño ha mostrado todo su interés, toda su decisión y esta es una decisión que finiquita el gobierno colombiano (…) y el presidente (Álvaro Uribe) ya lo debe saber».
«La fecha tentativa (para la liberación) es este mes si no hay ninguna dificultad con relación a los protocolos de seguridad», dijo la senadora, perteneciente al opositor Partido Liberal Colombiano.
Córdoba logró en 2008 y 2009 la liberación de un grupo de ex legisladores que las FARC mantenían como rehenes.
En tanto, el alto comisionado de paz Frank Pearl pidió «confianza» en la liberación de estos dos militares. «Tenemos todas las garantías del ministerio de Defensa para que estas personas puedan volver a su casa», dijo Pearl a la radioemisora Caracol en la noche del domimgo. «Lo que falta es que las FARC nos den la información (sobre la zona y la fecha de la liberación) a través de la senadora» para que se organice la logística. «Esto está en manos de ellos desde hace ocho semanas», añadió el funcionario.
Las FARC ofrecieron en abril de 2009 liberar a Moncayo, quien lleva doce años en cautiverio, y a Calvo, así como devolver los restos del mayor Julián Guevara, en un proceso que garantizarían la senadora Córdoba, el Comité Internacional de la Cruz Roja y la Conferencia Episcopal.
«Lo fundamental es que sigue en pie la decisión de la liberación», enfatizó la senadora Córdoba el domingo.
Las FARC, la guerrilla más antigua de Colombia, que cuenta con entre 6.000 y 10.000 hombres, mantiene en su poder a un total de 24 militares y policías, que plantea intercambiar por unos 500 rebeldes presos.
