Un juzgado condenó a pagar cárcel a dos hombres que hace más de 10 años participaron en un negocio ilícito de armas procedente de la ciudad estadounidense de Los Angeles.

El fallo de la jueza Dídima Romero afectó a Salvador Serna y a Carlos Bolívar, quienes fueron condenados a 58 y 52 meses de prisión, respectivamente, por su probada participación en el crimen de fabricación, tráfico y porte de armas y munición de uso privativo de las Fuerzas Armadas.

Según los dicumentos de la Fiscalía, los hechos investigados, ocurrieron el 29 de abril de 1999.

Ese día, en un vuelo procedente de Los Angeles, las autoridades en Bogotá hallaron en el interior de un paquete, a nombre del destinatario Anderson Gómez, proveedores para fusil calibre.

Dos días después, también en el aeropuerto El Dorado de Bogotá, la Policía encontró en otra encomienda que de nuevo procedía de Los Angeles cinco culatas en madera y cinco rifles calibre 7.62 de fabricación egipcia y húngara.

En el transcurso de la investigación, las autoridades pudieron establecer que en realidad Anderson Gómez era Salvador Serna, quien en los días posteriores al envío de armas se presentó en una empresa de envío de encomiendas a reclamar los paquetes con armas procedentes de Los Angeles.

Respecto de Carlos Bolívar, la jueza lo condenó luego de que en su casa fuera capturado Serna y porque, además, en el inmueble de su propiedad «se incautara gran cantidad de armamento de uso prohibido».

Tanto a Serna como a Bolívar les fue concedida la autorización para que su pena de detención la cumplan en sus respectivas casas en Bogotá. La sentencia de la jueza Romera fue emitida a fines de diciembre.

En la sentencia condenatoria no se dice nada sobre los supuestos contactos en Estados Unidos de los dos colombianos condenados.