El director general de la policía guatemalteca, la jefa de la unidad antinarcóticos y un tercer oficial fueron detenidos el martes como sospechosos en un caso que involucra el robo de un alijo de cocaína y un puñado de efectivos policiales muertos.

El anuncio de las capturas se da dos días antes de que la secretaria estadounidense de Estado, Hillary Rodham Clinton, visite el país centroamericano para hablar sobre el combate al narcotráfico.

El fiscal general Amílcar Velásquez dijo a la AP que el director de la policía Baltazar Gómez, la jefa antinarcóticos Nelly Bonilla y el oficial segundo Fernando Carrillo García están detenidos en lo que muchos consideran como otro vergonzoso caso en los esfuerzos de Guatemala por desterrar la corrupción. Ninguno de los tres ha sido acusado formalmente.

«Cuando eso pasó (el asesinato de los policías) informé a mis jefes superiores… son cosas que pasan en nuestro país, vamos a apelar», dijo Gómez a periodistas luego de su captura.

El jefe de la Comisión Internacional Contra la Impunidad en Guatemala (CICIG), el español Carlos Castresana aseguró que los cinco policías fallecidos, cinco más que han sido capturados y los tres mandos detenidos el martes formaban parte de una estructura criminal dedicada al robo de droga. Gómez entonces era jefe del Servicio de Análisis e Información Antinarcóticos (SAIA), Bonilla la subjefe y los diez policías investigadores o agentes de esa sección.

Las capturas son resultado de una investigación conjunta de las autoridades guatemaltecas y la CICIG, una entidad auspiciada por Naciones Unidas.

Funcionarios antidrogas de Estados Unidos se han quejado por largo tiempo de cómo la corrupción está dificultando su batalla por detener el flujo de drogas desde Latinoamérica. Clinton tiene programado discutir la lucha contra el narcotráfico cuando se entreviste con el presidente Alvaro Colom el viernes, culminando la gira que esta semana la llevó por la región.

No hubo comentario de inmediato en relación a las capturas por parte de la embajada estadounidense en Guatemala.

Velásquez dijo que «los detuvimos por estar vinculados al tumbe (robo) de drogas en Amatitlán donde fallecieron cinco agentes de la DAIA (Dirección de Análisis e Información Antidrogas)», refiriéndose al robo de cocaína que desencadenó un enfrentamiento entre policías y traficantes de drogas a finales de abril del año pasado.

Cinco uniformados murieron en el tiroteo en Amatitlán, a uno 30 kilómetros al sur de la capital.

Castresana, dijo que los cinco policías fallecidos y otros cinco más que lograron salvar su vida robaron unos 700 kilogramos de cocaína a un grupo de narcotraficantes, aunque «no podemos decir que fue el primero ni el último tumbe», añadió.

«El enfrentamiento ocurrió al regresar los policías por (otros) 350 kilos y armas y municiones… entonces los narcotraficantes les estaban esperando», añadió.

Las autoridades hallaron ametralladoras antiaéreas, fusiles de asalto y un lote de 500 granadas propulsadas en la bodega desde la cual fueron atacados los efectivos policiales.

Dijo que comenzaron una investigación al ver «una serie de incoherencias luego del hecho, como que a pesar de que murieron cinco agentes antidrogas, no se hizo una investigación por parte de la policía o que la DAIA no dejó entrar al Ministerio Público durante horas».

Cuando ocurrió el enfrentamiento, la policía dijo que cinco uniformados habían muerto al chocar con integrantes de los «Zetas», el brazo armado del cartel mexicano del Golfo. Castresana no hizo ninguna referencia a tal afirmación.

En septiembre, el jefe de la policía Porfirio Pérez fue suspendido y posteriormente detenido por supuestamente robar 300.000 dólares de traficantes. En la actualidad está a la espera de juicio.

El ex jefe antinarcóticos Adán Castillo fue descubierto en una filmación aceptando 25.000 dólares de un informante de la DEA para proteger un alijo de cocaína destinado a Estados Unidos a su paso por Guatemala. Castillo y su asistente fueron arrestados en el 2005 en Virginia después de haber sido invitado por la DEA a participar en un entrenamiento antinarcóticos.

El domingo, Colom relevó al ministro de Gobernación Raúl Velásquez quien había firmado un contrato de 6,2 millones de dólares con una compañía privada para comprar combustibles para la policía nacional en todo el país. Las autoridades dijeron que la compañía malversó el dinero. Velásquez no fue acusado de ningún delito.