Las autoridades indicaron que las playas de Santa Marta continúan bajo emergencia ambiental tras el derrame de combustible que se registró el domingo pasado y que las autoridades atribuyen a «manos criminales» que se dedican al hurto de hidrocarburos.
«Se declaró la emergencia ecológica para que los técnicos de (la petrolera estatal) Ecopetrol pudieran controlar la situación», señaló la Dirección Administrativa del Medio Ambiente (Dadma) de Santa Marta en una declaración remitida a la prensa.
El poliducto de la empresa de capital mixto Ecopetrol ya fue reparado por técnicos de la firma, pero alcanzaron a derramarse unos 20.000 galones de combustible en el lecho marino, según lo explicó la presidenta de la Junta de Acción Comunal de Don Jaca, Sonia Sevilla, zona donde se produjo el incidente.
El derrame empezó la noche del sábado sobre una quebrada que llega al mar, precisó la líder comunal.
«Encontramos en la zona de Don Jaca especies muertas como róbalo, camarón y mojarra», pescados que son parte fundamental de la dieta de los pobladores, añadió.
El comandante de la Policía de Mágdalena, coronel César Granados, atribuyó el hecho a manos criminales que con frecuencia se dedican al hurto de combustible.
Detalló que esas personas acostumbran instalar válvulas al tubo del poliducto aprovechando que es una zona prácticamente poco habitada y de espesa vegetación.
La contaminación marina llegó hasta una zona de hoteles exclusivos de Santa Marta. EFE
