Ante la difícil situación que afrontan miles de familias en Colombia y Venezuela por causa del invierno, los empleados de Bayer en estos dos países, decidieron suspender las actividades de celebración que se realizan tradicionalmente por esta época cada año en la empresa, para donar el dinero que se invierte y sumarse a la gran cadena de ayuda, que intenta mitigar el impacto que deja hasta el momento innumerables pérdidas humanas y materiales.

En Colombia los empleados aportaron 135 millones de pesos, que fueron doblados por Bayer, para entregar un total de 270 millones de pesos al Fondo Nacional de Calamidades para su campaña “Colombia Humanitaria”, de tal manera que la ayuda sea canalizada eficientemente y los recursos lleguen a quienes más lo están necesitando.

En la Costa Atlántica, uno de los lugares más afectados por el invierno, la Planta de Bayer CropScience está coordinando con la Gobernación del Atlántico la entrega de mercados y elementos de primera necesidad a los damnificados, por un valor equivalente a 17 millones de pesos. Toda la colaboración se canaliza a través de la Cruz Roja Colombiana.

Esta iniciativa ha despertado un sentimiento generalizado de orgullo en la compañía, pues el hecho de trabajar unidos en torno a un tema de ayuda humanitaria, fortalece no solo los valores empresariales sino las relaciones interpersonales.

Para Matthias Haug, presidente de Bayer en La Región Andina, “Hoy como nunca tenemos que estar unidos, rodeando y ayudando a quienes sufren la tragedia de perder a sus familiares, así como todos sus bienes. Seguramente Colombia, como en muchos de sus momentos de dificultad, sabrá salir adelante y entonces tendremos muchos más momentos para celebrar”.