Hace casi 6 años con bombos y platillos se abrió la primera convocatoria por la recién inaugurada COMISION NACIONAL DEL SERVICIO CIVIL.
Hoy después de haber sorteado toda clase de trampas, triquiñuelas y zancadillas que los padres de la patria quisieron poner, sigue meditabunda y a paso de tortuga la convocatoria 01 de 2005.

Podemos decir que el proverbio bíblico se cumple los últimos efectivamente son los primeros. Más de 120 convocatorias se han realizado con éxito y la 01 de 2005 sigue sin llegar a la meta. Es risible escuchar a los voceros de la CNSC decir en sus alocuciones que la convocatoria en el 2010 ha tenido avances significativos, es como darle una cachetada a los que llevamos casi 6 años en espera de un proceso y hoy todavía piden paciencia.

Cuando no fueron los políticos de turno, queriendo defender su fortín politiquero o su cuota burocrática en cualquiera de las entidades gubernamentales o regionales, fueron los empleados que a modo de arrendatarios se quisieron adueñar de la plaza que ocupaban sin ningún otro requisito que la recomendación de su padrino político y así múltiples tropiezos ha sufrido la primogénita convocatoria de la CNSC.

Los aspirantes por meritocracia además de sus cualidades de conocimientos generares, funcionales, comportamentales además de estudios y experiencia, también han hecho el merito para la mejor y más excelsa prueba LA PACIENCIA. Son casi 6 largos años donde muchos han muerto, otros se han ido del país, otros que se apuntaron como de servicios generales ya son profesionales, otros que cambiaron de oficio, otros que se cansaron de esperar y olvidaron el asunto y otros que por no estar pendiente de los plazos perdieron el año y acabaron la paciencia esperando una respuesta que no llego.

Si nuestro nobel de literatura hubiera estado al tanto de la CNSC hubiera tenido material suficiente para escribir una novela de esta larga, accidentada y deformada convocatoria. El pin que compraron más de 600.000 personas se adquirió a mediados del 2005 y luego de varios aplazamientos se realizo el examen el 5 de diciembre de 2005. Luego vino el pataleo de los sindicatos, luego el famoso acto legislativo 01 y en fin hasta las más altas cortes metieron su mano para salvar y dar a luz lo que en muchos países desarrollados se llama la meritocracia.

Todos los que aun seguimos vivos y sin empleo, visitamos la página de la comisión para ver casi siempre lo mismo: no avanza.

El hueso de la 01 se lo han pasado varios comisionados, sin ninguno de ellos levantar las manos en la línea final. Las dos últimas teleconferencias dieron la cara subalternos que hicieron anuncios de terminar el año finiquitando los toques para cerca de 20.000 aspirantes que esperan la tan anhelada lista de elegibles o resolución.

El chat de la página de la CNSC era el único canal que tenían los aspirantes para desahogarse con otros dolientes; este fue clausurado y muy mal remplazado por otro que funciona muy poco o muy mal, en fin el concursante no tiene quien le escriba ni quien le informe.