Karim Benzema y Nicolas Anelka, dos cuestionados artilleros franceses, respondieron el martes con goles que permitieron al Real Madrid y al Chelsea sacar resultados positivos fuera de casa en sus duelos de ida por los octavos de final de la Liga de Campeones.

Benzema entró y transformó en gol la primera pelota que tocó para un empate 1-1 con Lyon, mientras que una dupleta de Anelka liquidó con un 2-0 la visita del campeón de Inglaterra a la cancha de Copenhague.

Aunque el empate de visita con gol incluido se ve como buen negocio, el resultado dejó al Madrid aún jalándose los cabellos ante la imposibilidad de encontrar la manera de ganarle a los franceses.

Los nueve veces campeones de Europa tratan de sortear una etapa de octavos en el torneo que ha sido su muro insalvable desde 2004. Este fue el séptimo partido consecutivo en que los españoles se despiden sin poder ganarle a Lyon.

Al menos, ahora el Madrid logró sacar un empate tras perder los tres duelos previos como visitante. Los otros tres partidos en casa han acabado en empate, y el 16 de marzo deberá jugarse el pase en su estadio Santiago Bernabéu.

Apenas segundos después de ingresar por Emmanuel Adebayor, Benzema saltó al césped del Stade Gerland – donde es conocido por haber jugado en Lyon – y anotó a los 65 minutos. La jugada nació tras un robo de balón de Mesut Oezil por la banda izquierda, seguido por un pase de Cristiano Ronaldo.

Fue el quinto gol de Benzema en el certamen y su definición fue de gran factura: hizo una serie de recortes en medio del área, burló a tres defensas y con calma batió al arquero Hugo Lloris.

Benzema ha encontrado en Europa la vía al gol que no tiene en España, donde no parece gozar de la completa paciencia del entrenador José Mourinho. Eso fue lo que precipitó la llegada de Adebayor en el mercado de invierno.

Pero Lyon evitó a la derrota con el gol de Bafetimbi Gomis a los 83, aprovechando una pelota que se había desviado en Xabi Alonso.

Chelsea, que sigue en busca de ceñirse por primera vez la máxima corona europea, quedó con un pie adentro en cuartos de final.

La figura fue Anelka, autor de los goles a los 17 y 54 minutos, en ambos casos tras asistencias de Frank Lampard.

El atacante francés había quedado en un segundo plano después de la llegada del español Fernando Torres, fichado de Liverpool en enero pasado. Pero Torres sigue sin poder dar su primer grito de gol con la camiseta de los Blues.

La Copa de Europa ha quedado como la tabla de salvación para Chelsea en la temporada tras ser eliminado de la Copa de la FA y lejos del liderato de la Liga Premier inglesa.

La tanda de choques de ida se completará el miércoles. El campeón vigente Inter enfrentará a Bayern Munich en la reedición de la final del año pasado, mientras que Manchester United visitará al Olympique de Marsella.

AP