La crisis financiera no solo es inocultable, si que está haciendo insostenible a las universidades estatales, advirtió hoy en Radio Santa Fe, el rector de la Universidad Pedagógica, Juan Carlos Orozco.

El catedrático coincidió con algunos estudiantes que se comunicaron con el Noticiero Santa Fe, en que al margen de los disturbios y destrozos causados durante las marchas celebradas ayer en Bogotá y otras ciudades, que dijeron no compartir, la protesta es justa porque la universidad pública literalmente se está cayendo.

Orozco advirtió que el déficit acumulado de los centros de educación superior que dependen del Estado supera los 700 millones de pesos y añadió que, por esta razón, se carece de recursos no solo para el mantenimiento de las estructuras físicas de las universidades, sino para reforzarlas y evitar una catástrofe en caso de un sismo.

A propósito de este hecho, María Paula, quien se identificó como estudiante de la Universidad Nacional, reseño que el edificio de Artes “se está cayendo a pedazos”, hasta el punto que se ha advertido a los estudiantes que no ingresen porque corren el riesgo de morir aplastados.

El rector de la Pedagógica señalo que la crisis financiera de la universidad pública es muy grande y se requieren con urgencia recursos adicionales.

Añadió que debido a la falta de presupuesto las plantas de profesores de las universidades públicas son las mismas de hace 20 o 30 años, mientras el número de estudiantes y de programas se ha duplicado.

No hay plata para reforzamiento de estructuras y adecuarlas a las normas antisísmicas, tampoco para actualizar laboratorios y acondicionarlas de acuerdo con las nuevas tecnologías, señalo.

Subrayó que en este sentido, en forma insistente, se han hecho solicitudes al Ministerio de Educación, sin obtener una respuesta positiva.

A propósito de los disturbios registrados ayer en Bogotá, la alcaldesa encargada Clara López Obregón, dijo que los daños sobre la carrera 7a podrían superar los 100 millones de pesos.

La funcionaria condeno los desmanes y advirtió que no fue producto de provocaciones de la fuerza pública, cuyo comportamiento califico de admirable, sino de un grupo de 40 o 50 vándalos.