En carta dirigida al ministro de Agricultura, el senador Jorge Enrique Robledo hizo un llamado al gobierno nacional para que derogue las normas sanitarias que están lesionando gravemente a los porcicultores y a otros sectores del agro. Esta situación amenaza los ingresos de más de 90 mil familias.

Mediante el Decreto 1500 de 2007 del Ministerio de Agricultura y la Resolución 2640 de 2007 del Instituto Colombiano Agropecuario, el gobierno definió los requisitos que deben cumplir los productores de cerdos. La mayor parte de las exigencias son absurdas y costosas, por lo que los porcicultores no han podido cumplirlas. Por ejemplo, las normas los obligan a construir en sus granjas laboratorios de inseminación, requisito que requiere de grandes inversiones.

El senador Robledo señaló que las normas son imposibles de cumplir porque, además de ser absurdas, el Estado no ha respaldado a los porcicultores y “están diseñadas para aplicarse en países con un altísimo grado de desarrollo y no para economías como la colombiana”.

El congresista también afirmó que las exigencias del Ministerio “hacen parte de la política de perseguir la pequeña y mediana producción agraria, para entregársela a los monopolios, política que también está lesionando a los paneleros, a los avicultores y a los mataderos”. Agregó que estas normas se fundamentan en las concepciones de la Organización Mundial de Comercio y no en las de la Organización Mundial de la Salud y señaló que coinciden con el TLC con Estados Unidos, tratado que inundará el mercado nacional con las importaciones de cerdo.

Robledo hizo un llamado al gobierno para que derogue el Decreto 1500 de 2007 y la Resolución 2640 de 2007.