Un estudiante de grado once de un colegio del barrio La Estancia, al sur de Bogotá, perdió una mano al manipular una bala de gas lacrimógeno lanzada por la policía y que no estalló en su momento, durante los violentos disturbios registrados anoche por el desalojo de una vivienda por orden judicial.

El muchacho, de 15 años, se encontró el artefacto y lo llevó a su colegio La Nueva Estancia, donde estalló y le amputó su extremidad derecha. Ademas el gas afectó a otros alumnos del centro docente, ubicado en la carrera 74 calle 58 sur.

Como lo informó oportunamente el noticiero Santa Fe, el escuadron antidisturbios de la policía intervino para dispersar a los ciudadanos del sector que impedían el desalojo de la casa de la líder comunal Elisabeth Abril.

El hecho generó violentos enfrentamientos, en desarrollo de los cuales los integrantes de la fuerza pública utilizaron gases lacrimógenos y chorros de agua.