Las directivas del Boyacá Chicó manifestaron que no apelarán la decisión de la Dimayor de quitarle el punto y cumplir con una fecha de suspensión a puerta cerrada, por los desordenes ocurridos en el pasado sábado en su partido frente al Junior.

El presidente del equipo Ricardo Hoyos, tras conocerse la decisión de la Dimayor dijo que en la determinación “primó más un informe escrito del señor Adrián Vélez, quien 56 horas después de lo sucedido, consignó que había terminado el partido, cuando el sábado no notificó nada al respecto».

El equipo boyacense, además, fue sancionado con una multa de 5’356.000 pesos y una fecha de suspensión a puerta cerrada.

Tras la determinación, si el si Boyacá Chicó gana el partido en barranquilla a avanzará, pero si el encuentro termina empatado, será el Junior el que clasifique.