El muchacho de 15 años Wilmer Alejandro Bernal que fue quemado hace una semana por la Policía bajo un puente en el noroccidente de Bogotá, falleció esta mañana en el Hospital Simón Bolívar.

Como lo informó oportunamente el Noticiero Santa Fe, los policías supuestamente rociaron al joven con gasolina y luego le prendieron fuego.

Los dos uniformados acusados de la acción criminal, identificados como el intendente Carlos Danilo Posada y el patrullero Carlos Augusto Díaz Espejo, adscritos a la estación de Policía de Suba, fueron entonces suspendidos del cargo por un término de 90 días.

El macabro hecho ocurrió bajo el puente de la avenida Cali con calle 91, en jurisdicción de la localidad de Suba, al noroccidente de la capital de la república.

La madre del muchacho, Blanca Cecilia Camelo, quien aclaró en su momento que su hijo no era un indigente ni un drogadicto, al igual que algunos testigos, señaló como autores del criminal hecho a los dos agentes de la Policia Metropolitana.

En esa oportunidad, en diálogo con el Noticiero Santa Fe, la señora Blanca Cecilia afirmó que los agentes le quitaron al muchacho los tenis, la camisa y extrajeron gasolina de la motocicleta en que se movilizaban y le prendieron fuego.

«Cuando yo llegué el niño estaba en el piso, sin ropa y todo quemado en la cara, los brazos, las piernas y la espalda», afirmó entonces la madre.