De la mano de su creador Thierry Malandain, esta agrupación francesa reconocida por su particular estilo en el que fusionan el ballet clásico con tendencias más contemporáneas de la danza, regresa a Bogotá con tres coreografías: Mozart a 2, el Bolero de Ravel y El Amor Brujo de Manuel de Falla.
Los bailarines de este Ballet poseen una sólida formación clásica y disciplina atlética; sus coreografías dan prioridad al cuerpo danzante a través de la fragilidad, la fuerza y la sensualidad. Las funciones serán el viernes 24 y sábado 25 de febrero, a las 8:00 p.m. y el domingo 26 de febrero, 5:00 p.m. Boletería: 30 mil, 60 mil, 90 mil y 120 mil pesos.
Dando inicio a la Temporada Danza Internacional 2012, el Teatro Mayor Julio Mario Santo Domingo presenta al Malandain Ballet Biarritz, compañía de danza francesa reconocida por la sensualidad y fuerza de sus coreografías, así como su combinación de tendencias clásicas y modernas.
Los intérpretes de esta importante compañía francesa parten de la técnica del ballet clásico al tiempo que experimentan con la danza contemporánea; de este modo, se da prioridad al cuerpo de baile, su potencia, su virtuosismo, su sensualidad. Y, con independencia de la forma, abstracta o narrativa, el hombre y la danza están presentes, en cuerpo y alma, en las coreografías de Thierry Malandain.
La última vez que la compañía visitó nuestro país fue en 1999 en donde presentaron un inolvidable espectáculo en favor de los niños en situación de pobrezas de la capital colombiana.
En esta ocasión la compañía trae un variado programa conformado por tres hermosas e impactantes coreografías. La primera de ellas, Mozart a 2, es un ballet para diez bailarines acompañados al piano por el ruso Sergei Schikov quien interpreta música de los conciertos de piano del célebre compositor austriaco Wolfang Amadeus Mozart. En 1997 Thierry Malandain ojeó algunas páginas extraídas de los conciertos para piano de Mozart que le permitieron coreografiar los dúos de un ballet llamado Bal Solitude. Se trataba entonces de recorrer los episodios amorosos dentro del contexto de un baile de salón. Un lugar propicio para una fiesta, pero revelador de soledades cuando el amor no rima con “siempre”. Es esta fisonomía cambiante de un sentimiento, que se mide a veces a través de la amplitud de su ausencia, lo que el coreógrafo ha deseado abordar en Mozart a 2. Esta coreografía cuenta con la participación del ruso Sergei Sichkov al piano.
La segunda coreografía es Bolero, una analogía erótica basada en la célebre obra de Maurice Ravel. Thierry Malandain aborda el tema del encerramiento, aceptando el reto de confinar a los intérpretes a un espacio cerrado y restringido.
Finalmente y cerrando la presentación está El amor brujo coreografía montada sobre la obra del compositor Manuel de Falla, que se desarrolla entre gitanos de Andalucía, en un ambiente de superstición y brujería. Para esta pieza la Orquesta Sinfónica Nacional de Colombia cuenta con la participación de la cantaora española Antonia De la Cruz Contreras, quien es una artista inigualable, recia en las formas y profunda en la expresión, sensible a los más auténticos elementos que conforman la cultura tradicional del flamenco.