La Crónica Radio Santa Fé

Cómo entender que en el país de la galantería casi la mitad de las mujeres sean maltratadas?

Por Julia Lehmann
Periodista Alemana

¿Qué significa ser una mujer en Colombia? Implica ser tratada como una princesa, como una reina, por los hombres de este país. Por un lado, los hombres tratan a las mujeres de una manera muy especial, diferente a como es el trato con los del mismo sexo. Nos echan piropos, nos compran pequeños detalles, o nos gritan en la calle: “Hola, ¡qué bonita estás!”

Por supuesto, es posible ver este comportamiento como un halago, aún más si uno tiene en cuenta que en Alemania la manera de conquistar es mucho más sutil, tanto que ni siquiera se nota. De otro lado, para mí como alemana, este comportamiento lleva otra connotación. En esta actitud masculina siempre parece vibrar una brizna de machismo que deja la impresión de que la mujer fuera algo inferior al hombre, como si no fuera capaz de las mismas cosas que logran los hombres. El comportamiento masculino aquí se base en una representación de hombre y mujer que discrepa de aquella en Alemania. Aquí una mujer es considerada como algo especial y lógicamente es tratada así. Por el contrario en mi país no se advierte ninguna diferencia en el trato entre personas de diferentes sexos. Por lo tanto, ha sido una circunstancia muy extraña cuando me dijo el dueño de un restaurante aquí en Bogotá: “Señorita, hay que aprender una cosa importante en Colombia: una mujer nunca paga cuando está con un hombre.”

Sin embargo, es sorprendente que este comportamiento especial hacia las mujeres no excluye ciertas circunstancias. ¿Por qué es normal que un hombre aparte de su esposa pueda tener una o más novias? Ya me enteré de unos casos en los cuales la esposa y la amante viven en la misma casa. Peor aún, ¿por qué el estatus de ser algo especial no evita la violencia de la cual son víctimas las mujeres? ¿Cómo es posible entonces que casi el 40%, de las colombianas, según la ONU, experimentan violencia física o sexual durante su vida? Nada puede ser más contradictorio.