Frente a la expectativa de los ciudadanos que esperan ansiosos el servicio de los articulados de Transmilenio por la avenida el Dorado y el anuncio del Distrito de correr la fecha de inicio para la última semana de ese mes, Radio Santa Fe hizo un recorrido por los puntos más críticos que postergaron la finalización del proyecto.

No hay palabras o gestos para expresar el disgusto que genera en los bogotanos el incumplimiento de la administración Distrital de dar vía libre a los buses de TransMilenio como se había anunciado para el próximo nueve de junio.

La demora se evidencia primero en las obras de la construcción de los desagües en la paralela norte entre la Av. Rojas y la Av. Boyacá que han generados constantes inundaciones, situación por la cual se trabaja en el box coulvert constitución, obra necesaria para drenar este sector.

Otro atraso se presenta en la carrera treinta con calle veinte y seis, en la estación ´universitaria’, donde se realizan labores para el acceso al vagón.

Debido al adecuación de dos puentes, uno en la carrera Séptima y otro en la carrera Quinta por ese mismo corredor vial, se observan además, retrasos en las obras de los carriles que utilizarán los articulados.

Sumado a las anteriores demoras, no hay un conector de la estación ´universidades´ con la estación ´las aguas´, que permita continuar el recorrido de las personas en Transmilenio.

Radio Santa Fe, pudo constatar que debido al atraso de estas obras, se genera una gran congestión vehicular desde el Aeropuerto el Dorado, hasta la avenida Boyacá, el tráfico de colectivos y taxis en las horas pico desesperan a los conductores que requieren hasta veinte minutos para este recorrido.

«Nada raro, siempre es lo mismo. Mire, primero lo del carrusel de la contratación y ahora comienzan a jugar con nosotros y esta vía cada vez más congestionada», expresó un conductor de servicio público en medio del desespero por el paso lento en la vía.

Esperanza Osorio, quien transita diariamente por el sector en su automóvil dijo que «Siempre dicen que ahora sí, pero nada. Tanto tiempo esperando que se acaben estas obras y todavía siguen muy demorados, nosotros somos los que tenemos que soportar el trancón».

Mientras llega la nueva fecha anunciada por el Distrito, los conductores, peatones, y ciclistas deberán seguir soportando los trancones, la alta contaminación sonora por los ruidos excesivos y los problemas de movilidad.