El menos 40 personas murieron, en su mayoría militares, y otras 90 resultaron heridas como consecuencia de una sangrienta ola de atentados que sacudió el centro de Alepo, la gran metrópolis del norte de Siria, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH).

«La mayoría de los muertos y heridos son miembros de las fuerzas gubernamentales. Las explosiones tomaron como blanco un club de oficiales militares y puestos de control del ejército regular», indicó la ONG citando fuentes médicas. Un responsable de la segunda ciudad de Siria había informado antes de un balance de 27 muertos y 72 heridos.

Según detalló la organización, dos coches bomba explotaron primero en un intervalo de un minuto en dos calles cercanas a un club de oficiales militares que da a la famosa plaza Sadala al-Jabiri, en el corazón de Alepo, mientras que un tercer coche bomba explotó a 150 metros de la plaza, en la entrada de la ciudad vieja.

Como consecuencia de los ataques, al menos dos edificios de la zona se derrumbaron y otros quedaron prácticamente destruidos.

El conflicto que vive Siria desde marzo de 2011 ha causado ya unos 25.000 muertos, mientras que 2,5 millones de personas necesitan ayuda humanitaria y más de 250.000 se han refugiado en los países vecinos, según Naciones Unidas.

Santa Fe con agencias