Aunque los doctores de la Academia Nacional de Medicina visitaron al vicepresidente Angelino Garzón con el propósito de realizar el reconocimiento médico solicitado por el Congreso, el alto funcionario se negó al procedimiento, argumentando que al acceder a este requerimiento estaría abriéndole la posibilidad a un golpe de estado a la democracia colombiana.

«Prestarme en este momento a una evaluación médica para reemplazar temporalmente al presidente Santos sería como prestarme a un golpe de Estado a la democracia». Para Garzón, él fue elegido con el fin de Defender la Constitución y la Democracia, y una manera de hacerlo es defender el derecho de Juan Manuel Santos de ejercer la Presidencia de Colombia.

Y agregó: «es un ir respeto con el presidente pretender en este momento que el vicepresidente entre a reemplazar al presidente. Yo no fui elegido para usurpar cargos que no me corresponden».

El Vicepresidente señaló que le dijo a los médicos que “si con mi vida tengo que defender la democracia en Colombia, con mi vida estoy dispuesto a hacerlo».

«Si yo me presto a esto, me presto a un golpe a la democracia en Colombia», afirmó en rueda de prensa en su despacho, agregó. Además advirtió que el presidente Santos «desde su lecho de enfermo y es un hecho maravilloso y admirable».

De acuerdo con el vicepresidente Garzón, de haber accedido al examen, “el Congreso podría declarar que el Presidente de la República está impedido temporal o definitivamente para ejercer su cargo”.

Por su parte, el doctor Fernando Sánchez, director de la Academia Nacional de Medicina, manifestó que “se encuentra divinamente”.

En la sesión, que duró 45 minutos, participaron la abogada de la Vicepresidencia, el médico asesor de Garzón, un delegado de la Procuraduría General de la Nación y familiares del funcionario.