La Procuraduría General de la Nación destituyó e inhabilitó por 20 años a cuatro miembros del Ejército Nacional por permitir que integrantes de las Autodefensas Unidas de Colombia cometer el homicidio de cuatro adultos y cuatro menores en las veredas de Mulatos y La Resbalosa, en decisión de primera instancia.
Los afectados con la decisión disciplinaria son el capitán Guillermo Gordillo Sánchez, comandante de la compañía Bolívar del Batallón de Infantería nro. 47 “Francisco de Paula Vélez”; subteniente Alejandro Jaramillo Giraldo, orgánico de la Compañía Bolívar del Batallón de Infantería nro. 47 “Francisco de Paula Vélez”; subteniente Jorge Humberto Milanés Vega, orgánico de la compañía Anzoátegui del Batallón de Infantería nro. 47 “Francisco de Paula Vélez”; y el capitán Oscar Gerardo Omaña García, comandante de la compañía Alacrán del Batallón de Contraguerrilas nro. 33 “Cacique Lutaima” para la fecha de los hechos.
Se confirmó que el 21 de febrero de 2005 se encontraban en las veredas La Resbalosa y Mulatos uniformados del Ejército Nacional pertenecientes a los batallones de infantería nro. 47 “Francisco de Paula Vélez”, de contraguerrillas nro. 33 “Cacique Lutaima” y de Ingenieros nro. 17 “Bejarano Muñoz” en desarrollo de la operación militar nro. 002 “Fenix” y que algunos de los uniformados que integraban estos batallones permitieron que miembros de las AUC perpetraran el homicidio de estas ocho personas que se encontraban protegidas por las normas del Derecho Internacional Humanitario.
Los cadáveres fueron exhumados por la Fiscalía General de la Nación entre el 25 y el 27 de febrero de 2005. Se hizo el levantamiento de ocho cuerpos, cinco de los cuales estaban mutilados, descuartizados y se encontraban en una fosa común ubicada en la vereda La Resbalosa y los otros tres cuerpos fueron hallados a la intemperie en el sitio conocido como Mulatos.
La Procuraduría advirtió que contra esta determinación de primera instancia procede el recurso de apelación.