Las autoridades confirmaron que el joven, Pablo Andrés Salamanca, presentaba tercer grado de alcoholismo el pasado viernes cuando colisionó contra un taxi en la calle 26, en Bogotá, ocasionando la muerte de dos pasajeras y dejando gravemente herido al conductor.

Aunque la audiencia de imputación de cargos estaba programada para este sábado pasadas las 7:00 de la noche en la URI de Paloquemao, la defensa del joven pidió que se aplazara la diligencia alegando que el conductor había sido ingresado a una clínica psiquiátrica por estrés traumático

Según William Adán Rodríguez, abogado de Salamanca, no existió “intención dolosa de causarle la muerte a nadie, fue en accidente, un mal momento”. Ante la petición la Fiscalía aplazó la imputación de cargos y la medida de aseguramiento.

Por ahora se desconoce cuándo se reprogramará la audiencia en la que al joven se le imputarán cargos por homicidio por dolo eventual y lesiones personales, este último condicionado a que se determine la incapacidad definitiva y las secuelas del señor Holman Iván Cangrejo, conductor del taxi, a quien por ahora le dieron una incapacidad de 62 días provisionales.

Santa fe con agencias