El Vicefiscal, Jorge Fernando Perdomo, dijo este viernes que la extradición de los siete implicados en la muerte del agente de la DEA, James Terry Watson es procedente, lo que convierte en viable la solicitud de envío de la banda hacia los Estados Unidos.

Perdomo explicó que “la Fiscalía considera que la extradición es viable también en este caso y es una posición que tenemos desde el principio”.

El Vicefiscal agregó que continúan las indagaciones por parte de los investigadores colombianos, y que las acciones judiciales en Colombia contra estas personas seguirá en curso.

“Si en el eventual caso esa extradición, por X o Y motivos no llega a prosperar, la Fiscalía tiene el deber constitucional de seguir adelantando las investigaciones y por eso es que estas no han parado”, indicó el Funcionario.

Perdomo señaló que el nte investigador está a la espera del concepto de la Corte frente a la extradición y que por ahora la Fiscalía no puede entorpecer dicho trámite.

En caso de que el Alto Tribunal avale la solicitud presentada por EEUU el pasado jueves, serían enviados a ese país siete personas, quienes presuntamente componen una banda criminal dedicada a la realización de los llamados ‘paseos millonarios’ en la capital de la República.

Se trata de Gerardo Figueroa Sepúlveda, de 38 años de edad; Omar Fabián Valdés Gualtero, de 27 años de edad; Edgar Javier Bello Murillo, de 26 años de edad; Héctor Leonardo López, de 23 años de edad; Julio Estiven Gracia Ramirez, de 30 años de edad; y Andrés Alvaro Oviedo García, de 21 años de edad, quienes fueron acusados por la justicia del país del norte de dos cargos de homicidio en segundo grado, un cargo de secuestro y un cargo de conspiración para secuestrar. Oviedo García también fue acusado de dos cargos de asalto.

Adicionalmente, el gran jurado acusó a Wilson Daniel Peralta Bocachica, colombiano de 30 años de edad, por sus supuestos esfuerzos para destruir la evidencia asociada con el homicidio del agente especial Watson.

De acuerdo con la acusación, Figueroa, Valdés, Bello, López, Gracia y Oviedo García formaban parte de una conspiración de secuestro extorsivo que utilizaba taxis en la ciudad de Bogotá para atraer víctimas a un punto donde serían atacadas y robadas. Una vez la víctima se subía al taxi, su conductor hacía una señal a otros conspiradores para que iniciaran la operación de secuestro y robo.

La acusación proferida por EEUU señala que el 20 de junio de 2013, mientras se desempeñaba como funcionario de la Embajada de Estados Unidos en Colombia, el agente Watson tomó un taxi manejado por uno de los acusados, después de lo cual fue supuestamente atacado por otros dos de los acusados – uno que lo sometió con un arma paralizante y otro que lo apuñaló con un cuchillo, lo que condujo a la muerte del agente de la DEA.