Luto en la música nacional por muerte de Diomedes Díaz; Valledupar decreta 4 días de duelo
–Las autoridades de Valledupar decretaron 4 días de duelo, tras la desaparición de uno de los más grandes: Diomedes Diaz, cuyas exequias se cumplirán este miércoles a partir de las 4 de la tarde en la capital del Cesar. El cuerpo del artista permancerá en cámara ardiente en la tarima Francisco el Hombre, en la Plaza Alfonso López.
“Que vaina tan difícil es vivir sin ti”, es la estrofa de una de sus canciones que han coreado sus seguidores en los alrededores de su casa en el barrio Los Ángeles, de la capital del Cesar, donde, en la soledad de una habitación, mientras dormía, dejó de existir.
Un infarto puso fin a su vida, a 3 días de haber sacado al mercado su última producción discográfica titulada ‘La vida del artista”.
Diomedes se había encerrado en su habitación y en un momento dado su esposa Consuelo Martínez, trató de entrar pero no lo pudo hacer porque estaba con llave por dentro. Tocó la puerta y al no obtener respuesta, lanzó la alarma. Fue necesario que un allegado a la familia ingresara por la ventana.
El artista estaba moribundo. Su hermano Ever Díaz dijo que el “Cacique de la Junta” murió durmiendo, pues se encontraba en su cama.
Joaquín Guillén, exmanager y amigo cercano del ‘Cacique de La Junta’ dijo que Diomedes al parecer murió en la madrugada del domingo, puesto que durmió solo en la habitación y hasta el mediodía, se percataron de que no había pedido ni agua ni comida.
El cuerpo del ‘Cacique’ llegó rígido a la Clínica del Cesar, hasta donde lo llevó Rafael Elias Santos Díaz, uno de sus 28 hijos.
“Se acostó tranquilo, su señora durmió en otro cuarto, y al mediodía al ver que no se despertaba, empezaron a tocarle la puerta y nada. Se metió un muchacho por la ventana y lo encontró muerto, lo trajimos a la clínica pero nada ya estaba duro. Tuvo que haber muerto de un infarto en la madrugada”, expresó Guillén.
Sin embargo, la noticia de su fallecimiento sólo se difundió hacia las 6 de la tarde.
Premonitoriamente, entre sus últimos trabajos figura el tema “Ni amigos, ni novios”, que grabó con su hijo Martin Elias.
Diomedes, nació en la finca «Carrizal», en La Junta, corregimiento de San Juan del Cesar, Guajira, el 26 de mayo de 1957. De extracción humilde y campesina, pasó sus infancia trabajando como jornalero.
De adolescente perdió el ojo derecho al recibir accidentalmente una pedrada cuando con algunos amigos trataba de alcanzar un racimo de mangos.
A los quince años se desempeñó como mensajero en bicicleta en la emisora Radio Guatapurí de Valledupar, por la que se dieron a conocer sus primeras composiciones, «La Negra» y «El Cantor Campesino», grabadas posteriormente por Jorge Quiroz y Luciano Poveda.
En 1976 grabó por primera vez junto con el acordeonero Náfer Durán, hermano de Alejandro Durán, el disco «Herencia Vallenata».
El apodo «El Cacique de la Junta» se lo debe a Rafael Orozco, quien lo llamó así en su interpretación de la canción de la autoría de Díaz «Cariñito de mi vida» (1975).
En una de las últimas entrevistas que concedió a Ernesto McCausland manifestó que le tenía miedo a la muerte, que no le gustaría morirse y que esperaba que le tocara ya de viejo.
Sin embargo, su corazón le falló a los 56 años.
La última actuación de Diomedes Díaz fue el pasado viernes 20 de diciembre en la discoteca Trucupey de Barranquilla.
El conguero del grupo dijo que Diomedes manifestó que esa sería su última presentación, porque este año ya no tocaba más.
«Se dio unas vacaciones él mismo, nos dio a cada uno dos millones de pesos para que pasáramos diciembre tranquilo”, señaló.
Cientos de miles de coterráneos y fanáticos, tanto en la capital del Cesar como en otros municipios de este departamento, en Bogotá y en otros puntos de la geografía colombiana, recondando sus éxitos, lamentan y hasta lloran su muerte.
Las manifestaciones se han producido especialmente en las redes sociales.
“Fueron muchas las horas de felicidad que pasamos con las canciones de Diomedes Díaz. Paz en su tumba”, escribió en su cuenta en Twitter el presidente de la República Juan Manuel Santos.
«Llora la música», afirmó en la misma red el expresidente Alvaro Uribe.
«Diomedes ayuda a que las lágrimas de tu partida se consuelen en el recuerdo de tus canciones», complementó el exmandatario.
El alcalde de Bogotá, Gustavo Petro escribió: «Me entristece la muerte de Diomedes Diaz, quería una fusión entre la música del cantante y la Orquesta Filarmónica de Bogotá»
Juanes, precisó: “Perdí la cuenta de tantas parrandas cantando y escuchando su música…Tristeza por la muerte de Diomedes”.
“Lamentando la muerte del cacique Diomedes Diaz, vivió intensamente y fue uno de los pilares de lo que aún se conoce como la nueva ola”, reseñó Carlos Vives.
“Se nos fue la expresión natural del pueblo.. Diomedes Diaz! Tus locuras, tu canto, tu risa, tu estilo.. Se siente impotencia con tu partida!”, escribió a su turno Silvestre Dangond.
Radamel Falcao trinó: “Q.E.P.D Diomedes Díaz, Tu música nos acompañará por siempre. Que Dios fortalezca los corazones de su familia en este duro momento.”
“Diomedes era lo más grande que teníamos dentro del vallenato, nuestra insignia”, declaró otro grande del vallenato, Alfredo Gutiérrez, quien añadió: “Al desaparecer hoy, vamos a que el verdadero vallenato desaparezca”.
Uno de los episodios más oscuros y dramáticos que vivió el Cacique de la Junta fue la muerte de Doris Adriana Niño García, de 22 años, con quien sostenía una relación sentimental, hecho ocurrido hacia la medianoche del 14 de mayo de 1997, en un apartamento del artista en el barrio San Patricio, en Usaquén, al norte de Bogotá.
La investigación estableció que Doris Adriana se traslado al lugar en compañía de un escolta de Diomedes. Sin embargo, al día siguiente, un campesino reportó el hallazgo del cadáver de una mujer en zona rural del municipio de Cómbita, cerca a Tunja, la capital de Boyacá.
Tras los análisis forenses se estableció la identidad del cuerpo. El Instituto de Medicina Legal concluyó que Doris Adriana murió aproximadamente a las tres horas del 15 de mayo, a consecuencia de un paro cardiorrespiratorio, provocado por una sobredosis de cocaína.
El fallo proferido por el juez 46 penal de Bogotá declaró a Diomedes Díaz culpable de homicidio preterintencional. Esto quería decir, según consta en la sentencia, que Díaz usó la fuerza contra Niño García cuando, intentando controlarla o acallarla, le tapó la nariz y la boca con su mano, lo que le ocasionó a la postre la muerte por asfixia. Para el juez del caso, Díaz era consciente de que con su acción iba a hacerle daño a Niño García pero no tenía la intención de asesinarla.
Por estos hechos, Diomedes Díaz fue condenado a 12 años de prisión por el delito de homicidio. Sin embargo, un juez redujo su condena a 6 años, de los cuales cumplió 3 años y 7 meses, recibiendo luego la libertad condicional.
En 2007, Díaz pagó una indemnización equivalente a 67.000 dólares a la familia de Niño García. El abogado defensor de Díaz dijo que el dinero fue depositado por concepto de daños morales y materiales.
El cuerpo del Cacique de la Junta será puesto en cámara ardiente en la Plaza Alfonso López de Valledupar. Todavía no se ha definido cuándo se cumplirán las exequias.
Los comentarios están cerrados.