Julián Andrés Santamaría Toro, presunto miembro de una una banda denominada Los Rambos, que se dedica a comercializar vehículos hurtados y autopartes de los mismos, fue cobijado con medida de aseguramiento consistente en detención preventiva en establecimiento carcelario.

El Juzgado 68 Penal Municipal de Bogotá determinó que Santamaría Toro constituye un peligro para la comunidad y las victimas. Durante la audiencia pública le imputaron los delitos de receptación en concurso con concierto para delinquir. El investigado aceptó los cargos.

Santamaría Toro, de 35 años, era el encargado de comerciar y vender los autos robados por la banda, gracias a un almacén de repuestos que tenía en un sector del Barrio 7 de Agosto, en el norte de Bogotá.Los Rambos hurtaban por lo menos tres vehículos al día en Bogotá, Facatativá, Mosquera, Chía y Zipaquirá, todos municipios de Cundinamarca.

Gracias a interceptaciones telefónicas y el seguimiento personal se pudo establecer la participación del investigado. La banda operaba utilizando dos automotores y una motocicleta, vehículos con los cuales eran seguidas las victimas. ,a las cuales interceptaban y amenazaban con arma de fuego .

Al final de la audiencia, Santamaría Toro fue enviado a la cárcel Nacional Modelo de Bogotá.