Un parte de tranquilidad a los padres y familiares de 333 adolescentes y jóvenes recluidos en el Centro Educativo El Redentor, entregaron representantes del Instituto Colombiano de Bienestar Familiar, la Procuraduría General de la Nación, la Defensoría del Pueblo, la Policía Nacional y la Secretaría Distrital de Gobierno.

La comisión de funcionarios, encabezada por la Directora General del ICBF, Cristina Plazas Michelsen, recorrió el Centro Educativo para verificar los derechos de los jóvenes, evaluar los daños en la infraestructura y establecer las medidas necesarias para garantizar que continúen cumpliendo sus sanciones bajo el modelo pedagógico vigente y con todas las condiciones aptas para ello.

La directora de Protección del ICBF, Ingrid Rusinque Osorio, destacó el trabajo articulado de las entidades del Sistema de Responsabilidad Penal para adoptar las medidas necesarias. “Hemos hecho una revisión de las instalaciones y estamos tomando las mejores decisiones, siempre pensando en la prevalencia de los derechos de los adolescentes”, afirmó. “Sabemos que los padres están preocupados, pero vamos a garantizar que los adolescentes y jóvenes que están aquí, estén en las mejores condiciones”, agregó.

Igualmente manifestó que se continuará trabajando de forma articulada con todos los equipos técnicos de las entidades del Sistema para brindar las mejores alternativas que garanticen la atención de los jóvenes.

Es de señalar que en El Redentor se encontraban recluidos 333 jóvenes, entre ellos 153 mayores de 18 años, cumpliendo las sanciones impuestas por los jueces de responsabilidad penal para adolescentes. A esta hora, el reporte tras los disturbios registrados anoche es de cuatro jóvenes y seis educadores atendidos por lesiones y 22 jóvenes evadidos de la Institución, 11 de ellos menores de edad.

La Directora de Protección hizo un llamado a los jóvenes para que no recurran a las vías de hecho violentas, pues dichas situaciones pueden afectar sus procesos o sumarles otras conductas de conflicto con la ley.