Las autoridades de las organizaciones regionales y zonales agrupadas en la Organización Nacional Indígena de Colombia, ONIC, se encuentran a la espera de una respuesta por parte del Gobierno Nacional, ante la propuesta de una mediación por parte de esa comunidad, para la liberación del general Alzate, junto con otros 3 militares y la abogada Gloria Urrego secuestrados por las Farc.

“Nosotros el año pasado hicimos un minga humanitaria en el caso de Nariño para rescatar doce cuerpos por una masacre que había cometido las Farc” (…) “En esto la Guardia Indígena ya tiene experiencia, sobre todo porque son territorios que los indígenas conocen” manifestó Luis Fernando Arias, consejero mayor de los indígenas.

En el comunicado emitido por la ONIC El día martes 18 de noviembre, manifestaron su preocupación por la afectación que pueda ocasionar el secuestro del General y de más retenidos en el proceso de paz: “manifestamos nuestra preocupación respecto a la situación por la cual atraviesa el proceso de paz que actualmente se desarrolla en La Habana, como consecuencia de hechos que involucran la retención de un militar de alto rango y otros miembros del Ejército Nacional por parte de las FARC-EP”, señala un aparte del comunicado.

En la misiva enviada al Gobierno, aclaran que las comunidades indígenas están al servicio del pueblo y lejos de los grupos irregulares, “No puede interpretarse que la Guardia Indígena está al servicio de los actores armados, por el contrario, es una fuerza civil de paz y de protección de nuestros territorios indígenas, la vida y la dignidad, señalaron.

La comunidad propone la creación de una “Minga Indígena Humanitaria, la cual estaría liderada en gran parte por miembros de la Guardia Indígena de los Pueblos que perviven en el departamento del Chocó” facilitando la logística de una eventual liberación.

Sobre la misiva, el gobierno no se ha pronunciado, mientras tanto y Gracias a la mediación de los gobiernos de Cuba y Noruega, países garantes del proceso de paz, en las últimas horas anunciaron el inicio del proceso de liberación del general Rubén Darío Alzáte y otros 3 militares y la abogada Gloria Urrego secuestrados por las Farc. Tras definirse las condiciones para la entrega de los plagiados, ahora se espera que se activen los protocolos para que una misión humanitaria, encabezada por el comité internacional de la Cruz Roja, adelante el operativo para recibir a los plagiados.