–El expresidente Cesar Gaviria Trujillo confirmó un parentesco en tercer grado con el sujeto que anteponiendo la consabida frase «usted no sabe quien soy yo» o «usted no sabe con quién se metió», protagonizo borracho un bochornoso espectáculo en la zona rosa al norte de la capital de la república.

El joven dijo llamarse Nicolás Gaviria y tuvo un altercado con unos taxistas y cuando la policía intervino para controlar la situación, agredió verbal y fisicamente a los uniformados, advirtiendo su ascendencia «expresidencial».

Con palabras soeces llegó incluso a amenazar a los policías con llamar al general Rodolfo Palomino, director de la institución y hacerlos trasladar al Chocó

Tras concluir el incidente, el borrachito fue dejado en libertad.

Esta mañana, el expresidente Cesar Gaviria Trujillo emitió un comunicado en el cual admite que el sujeto si es familiar suyo, pero en tercer grado.

El exmandatario “lamenta, deplora y rechaza que se utilice su nombre para mediar ante las autoridades”. Sin embargo advierte que «no intercedió ni aun está enterado de semejante accionar”.

En declaraciones a los colegas de Blu Radiko, el protagonista del escándalo, Nicolás Gaviria explicó que el incidente comenzó cuando un taxista que lo trajo desde el vecino municipio de Chía le cobró más de 200 mil pesos por la carrera y al replicar llegaron otros taxistas a amenazarlo.

Al efecto señaló: “Me cobraron una cifra exorbitante. Intenté ingresar a un establecimiento para protegerme porque me sentí amenazado. Y fue ahí cuando llegó la policía empezaron a cogerme, me querían llevar arrestado. Ahí fue cuando me puse bravísimo, como ustedes pueden ver en el video que está editado, está cortado”.

Aclaró que no insultó a los policías sino a los taxistas y advirtió que la grabación no muestra lo que en realidad pasó.

“Ahí había unos taxistas que eran quienes me querían agredir, yo en ningún momento dije a la policía ‘yo soy sobrino de no sé quién, voy a mandar a no sé quién’. Yo solamente dije ‘¿usted no sabe quién soy yo?’ Porque yo siempre me la paso en esa zona y voy a rumbear allá entonces la gente lo tomó de una manera muy deliberada. Pero el hecho es que la policía me cogió mi celular y me lo dañó”.

Finalmente reconoció haber llamado telefónicamente a un oficial de la Policía de apellido Díaz, quien, efectivamente llegó al lugar de los hechos, pero, según lo afirmó, para mediar frente al altercado.