Una nueva modalidad de robo se conoció este lunes pasado en la localidad de Chapinero, en el nororiente de Bogotá. Dos jóvenes fueron victimas del ‘paseo millonario’ a pie.

De acuerdo con el relato de los dos jóvenes, todo sucedió en horas de la tarde, pasadas las 6, en la carrera 11 con calle 79. Por ahí caminaban los jóvenes cuando dos hombres que iban por delante de ellos se voltearon y les reprocharon que los estuvieran mirando mal.

Según relataron al diario El Tiempo, llegaron otros dos y los arrinconaron, uno de ellos insinuó tener un arma blanca dentro de una mochila. Los delincuentes les dijeron que vendían droga y que no les gustaban los sapos.

Después afirmaron que no eran ladrones y que para probarlo podían darles sus celulares y que se los devolverían.

“Nos decían todo el tiempo que no nos querían robar, que querían saber que éramos personas de bien”, manifestó una de las víctimas.

Seguidamente, los delincuentes les preguntaron por la cantidad de plata tenían en sus cuentas de ahorros.

“Si me dice la verdad no lo robo, me decían. No entendíamos qué estaba pasando, eran muy buenos hablando ‘mierda’ para manipularnos psicológicamente”.

Presionados por los delincuentes, los dos jóvenes confesaron cuanta plata tenían en sus cajeros, por lo que inmediatamente fueron obligados a ir con toda la banda hasta un cajero electrónico ubicado en la calle 82 con carrera 13.

En ese cajero lograron retirar $ 1’200.000 de un Servibanca. Luego caminaron cuatro cuadras hasta un cajero del Caja Social ubicado en la carrera 15 con calle 79. De ahí retiraron $1’400.000 más.

Los ladrones les pidieron la plata y les dijeron a los jóvenes que no gritaran ni avisaran a la Policía.

“Si lo hacen y nos cogen, en 24 horas salimos libres y ya sabemos dónde trabajan ustedes, ya los conocemos”, afirma una de las víctimas.

Posteriormente, los jóvenes se comunicaron con la Policía del cuadrante y presentaron la denuncia formal de lo ocurrido.

Las victimas hicieron un llamado a las autoridades para que investiguen las cámaras de seguridad de uno de los cajeros, en la cual habría quedado la imagen de uno de los ladrones.

“Es un cuento muy bien armado el que tienen para intimidar a la gente y logran mantenerlo por mucho tiempo. Se veía que no era la primera vez que lo estaban haciendo”, sostuvo uno de los denunciantes.