Ciencia y Tecnología

La NASA inicia misión para buscar vida en una de las lunas de Júpiter

Luna Europa de JupiterLa Agencia Espacial estadounidense (NASA) anunció que realizará un futura misión a la luna Europa de Júpiter, cuyo fin será investigar si este satélite lleno de hielo, podría tener las condiciones necesarias para albergar vida. La sonda estadounidense Galileo, que exploró Júpiter y sus lunas entre 1995 y 2003, detectó indicios en Europa de la presencia de un océano del tamaño de nuestra luna, instalado sobre una capa de hielo.

La misión que tendrá una duración de tres años, que tendrá una lista de nueve instrumentos y sensores que irán a bordo de la sonda espacial, determinará si la superficie helada de Europa esconde un océano líquido, salino y a una temperatura que permita formas de vida.

Según los investigadores, esa luna, que tiene un tamaño similar al de la luna de la Tierra, podría tener un océano debajo de la capa congelada de tamaño desconocida. Si se prueba que existe este océano, es probable que tenga hasta el doble de agua que la Tierra.

“Estamos muy emocionados sobre el potencial de esta nueva misión y los instrumentos que utilizaremos para develar los misterios de Europa en nuestra búsqueda para encontrar la evidencia de vida más allá de la Tierra», dijo John Grunsfeld, administrador asociado del Directorio de Misiones de Ciencia de la NASA en Washington.

Este es el primer paso de un proyecto al que la NASA destinará 30 millones de dólares en el presupuesto de 2016, con la intención de poder lanzar la sonda alrededor del año 2022.

La sonda, que aún no tiene nombre, estará impulsada por energía solar y debería orbitar Júpiter en una órbita elíptica que le permita sobrevolar la superficie de esta luna a distancias que van desde los 25 kilómetros a los 2.700 kilómetros.

Los instrumentos elegidos incluyen un conjunto de cámaras y espectrómetros que crearán imágenes de alta resolución de la superficie de Europa para determinar su composición química, así como la de los posibles géiseres de agua que emanan de la capa helada, detectados en 2012 por el telescopio espacial Hubble.

La sonda de la NASA también transportará un radar que permitirá conocer el grosor de la capa helada de Europa y buscar lagos ocultos bajo el hielo, del mismo modo que sucede en la Antártida.

Asimismo, un magnetómetro determinará la intensidad y dirección del campo magnético del satélite de Júpiter, mientras que otros sistemas de medición buscarán evidencias claras de las emanaciones de agua y de que existen mareas líquidas bajo el hielo.

Si se confirma la existencia de estos géiseres, que proyectarían agua salada a una altura de hasta 200 kilómetros, Europa se situaría, sin duda, como uno de los más sólidos candidatos para albergar algún tipo de vida extraterrestre.

“Éste es un paso gigantesco en la búsqueda de un oasis que pueda albergar vida en nuestro patio trasero celeste”, explicó en un comunicado Curt Niebur, científico del programa Europa de la NASA.

“Confiamos en que este conjunto de instrumentos científicos permita interesantes descubrimientos en esta esperada misión”, añadió Niebur.