Por voces de auxilio de la comunidad, un grupo de uniformados que integran la Dirección Administrativa y Financiera, en medio de sus actividades de apoyo a la seguridad, durante patrullaje alrededores de un reconocido centro comercial, rescataron a un pequeño minino que se había alojado dentro de un motor a causa del alto flujo de personas.

Tras presentar un extraño calentamiento, el dueño del automotor se percató de un extraño ruido a causa del desespero del animal por salir de entre las latas y al parquear, su asombro no era otro, llevaba dentro del motor a un gato.

Uno que otro curioso trató de brindar ayuda refrescando al animal con agua mientras se unían a este bello gesto estos policías. De manera inmediata recurrieron a herramientas para extraer el gato con extremo cuidado, sin importar uno de ellos como todo un experto mecánico se acostó y empezó este rescate; pasados minutos y con susurros de transeúntes, apareció él, un bello ejemplar que maullaba como agradeciendo el noble gesto de extraños que lo abrazaban y examinaban.

Los aplausos no se hicieron esperar, y no era para menos, esta historia tuvo un final feliz gracias a la decidida solidaridad de la mejor pareja, Policía – comunidad.