Al acto de excusas públicas por parte del ciudadano Nicolás Gaviria Stanich a la Policía Nacional de Colombia, realizado en el auditorio General Santander de esa institución, asistieron el director de la Policía Metropolitana de Bogotá, General Humberto Guatibonza; el Fiscal General de la Nación, Eduardo Montealegre Lynett, y el Vicefiscal, Jorge Fernando Perdomo.

Asimismo, más de 500 policías asistieron al acto en el que Gaviria Stanich ofreció excusas por el episodio de agresión verbal en contra de algunos agentes policiales de Bogotá. En su intervención, el Fiscal General de la Nación hizo un reconocimiento a la Policía Nacional por los “permanentes esfuerzos y sacrificios por mantener la convivencia pacífica entre los ciudadanos, son reconocidos en su verdadera magnitud”.

Igualmente hizo un llamado a que este acto de desagravio fuera visto como un homenaje a la importante labor de la Policía Nacional.

El Fiscal General explicó las razones que llevaron al ente acusador a propiciar mecanismos de entendimiento entre Nicolás Gaviria y la Policía Nacional:

“En Colombia hemos creído que la justicia penal equivale necesariamente a la cárcel. Se cree mayoritariamente que el deber estatal de sancionar a quien comete una falta contra el ordenamiento jurídico se satisface solo cuando se pone a esa persona tras las rejas. Por el contrario, soy un convencido de que la equivalencia entre justicia y cárcel que ha prevalecido por muchos años en Colombia, está en mora de ser revaluada”, aseguró el jefe del ente acusador.

“Por lo anterior, desde la Fiscalía General de la Nación hemos abogado y promovido algunos espacios de justicia penal de corte restaurativo. A través de estos, buscamos que el entendimiento mutuo entre la víctima y el agresor logre sanar las heridas y resarcir el daño infligido. A nuestro juicio, un modelo de justicia con estas características, es acorde al deber que tiene el Estado de castigar a quien ha cometido un delito y, al mismo tiempo, permite que una conducta punible se aproveche, en el mejor sentido del término, para que la sociedad progrese social y moralmente, afirmó Montealegre.

“El acto de desagravio que hoy nos reúne constituye una fiel muestra de que la justicia puede lograr muchas veces reparar a la víctima del delito y, simultáneamente, rehabilitar al agresor”, aseveró el Fiscal General.

La Fiscalía General, en su calidad de entidad encargada de ejercer la acción penal, abrió una investigación preliminar por los hechos ocurridos en la madrugada del 1 de marzo de 2015, lo anterior, en la medida en que la conducta del señor Nicolás Gaviria podría presuntamente enmarcarse dentro del delito de agresión contra servidor público.

“Iniciada la investigación, el ciudadano Nicolás Gaviria dio genuinas muestras de arrepentimiento sobre lo sucedido, y se mostró dispuesto a reconocer su falta y a reparar a los afectados. Por ello, pese a que el irrespeto que exhibió aquella noche ante la autoridad, es digno de reproche, consideramos que la baja lesividad de su conducta desde una perspectiva puramente penal, abre las puertas a mecanismos de justicia restaurativa para hacer frente a su falta”, indicó también el Fiscal General.

Y agregó, “de ahí que la Fiscalía considere jurídicamente adecuado, que el ciudadano Nicolás Gaviria pida disculpas, indemnice a sus víctimas y, al mismo tiempo, se involucre directamente en una amplia campaña a nivel nacional para ayudarnos a erradicar definitivamente de Colombia aquella desdeñosa actitud de querer ponerse siempre por encima de la ley y las autoridades.”

Finalmente el Fiscal General hizo una invitación respetuosa a la Policía Nacional para que “acepte las disculpas que ha ofrecido el señor Nicolás Gaviria, y a que le ayuden a recomponer el tejido social que ha sido resquebrajado con su falta. Más que la cárcel, estoy convencido de que esta alternativa de justicia restaurativa, es decir, una alternativa de justicia menos retributiva que busca dejar las cosas incluso mejor que como estaban antes, resulta más provechosa para la sociedad colombiana”.