Las autoridades de Dubái investigaban las causas del misterioso y voraz incendio ocurrido en Nochevieja en uno de los hoteles más lujosos de la ciudad, un rascacielos de 63 plantas, que este viernes seguía echando humo.
Según los investigadores, el incendio comenzó en el piso 20 del hotel The Address Downtown a una hora a la que miles de personas, entre ellas numerosos turistas, se habían congregado en ese barrio para celebrar el cambio de año.
Pese a que las llamas provocaron el pánico en los alrededores del rascacielos, no hubo que lamentar ningún herido grave. El fuego no había sido totalmente extinguido el viernes a media mañana y varios pisos del hotel seguían envueltos en una humareda negra, constató un fotógrafo de AFP, mientras las calles aledañas al edificio seguían cortadas.
El origen del siniestro aún no ha sido determinado y se espera pronto un comunicado de las autoridades. Un alto responsable de los servicios de seguridad, el general Dahi Khalfan, publicó en Twitter una foto en la que mostraba un pequeño fuego bajo un alféizar en la parte inferior de la torre. «Es ahí donde comienzan las investigaciones», indicó sin dar más detalles.
El Address Downtown, inaugurado en 2008 y propiedad de la inmobiliaria Emaar, es la décimo-octava torre más alta de Dubái y la 93 del mundo.
Se encuentra situada cerca del Burj Khalifa, el rascacielos más alto del mundo, en torno al cual prosiguieron los festejos de Año Nuevo a pesar del incendio.
Para escapar al fuego, un fotógrafo, que pidió mantener su anonimato, se aferró a una cuerda de la planta 48, unida a una plataforma exterior utilizada por los limpiadores del hotel, y permaneció suspendido en el vacío durante media hora.
«Desplegué unos 30 metros, me la fijé a la cintura y a mi equipo de fotografía y descendí del balcón», explicó el hombre, quien pidió posteriormente por teléfono a sus compañeros que contactaran los equipos de socorro. Media hora después fue rescatado sano y salvo. El balance oficial es de 16 heridos, 14 de ellos, leves.
Cuatro escuadrones de bomberos participaron en la extinción del incendio, donde también se desplegaron ambulancias y helicópteros. Muchas personas alabaron en Twitter la rapidez de los servicios de emergencias y de los bomberos. Aunque las autoridades de Dubái realojaron a los residentes del hotel, en las redes sociales algunos habitantes propusieron a los afectados alojarlos en sus casas.
«Si están en Dubái, se han visto afectados por el incendio y necesitan pasar la noche en algún sitio, utilicen el hashtag #needanaddress». Publicando fotos con los fuegos artificiales de Año Nuevo, las autoridades locales recordaron el «apego obstinado» de Dubái a sus «grandes proyectos e iniciativas».
En febrero 2015, otro gigantesco incendio se declaró en uno de los rascacielos más altos de Dubái, «The Torch», lo que obligó a evacuar a cientos de residentes. No se registraron víctimas.