
El Consejo de Estado decretó la pérdida de investidura del actual Gobernador de Norte de Santander, William Villamizar Laguado, quién admitió las pretensiones de una demanda presentada en su contra cuando era concejal de Cúcuta.
El fallo del tribunal administrativo de Norte de Santander consideró que Villamizar Laguado, cuando fungía como concejal, incurrió en una indebida destinación de dineros públicos a los trabajadores del municipio.
Todo se remonta en el año 2002 cuando el entonces concejal Villamizar y otro grupo de 12 cabildantes aprobaron un proyecto para que crearan como factores salariales unas bonificaciones por servicios prestados a los empleados del municipio.
De acuerdo con el fallo, los funcionarios recibirían además una prima de servicios, subsidio de alimentación y auxilio de transporte, entre otros beneficios.
Sin embargo, se consideró que el Concejo de Cúcuta no tenía ese tipo de facultades hecho por el cual se presentó una demanda administrativa en contra de aquellos responsables de aprobar dicho acuerdo.
En fallo de primera instancia el Tribunal Administrativo de Norte de Santander rechazó la solicitud de perdida de investidura en contra de los concejales.
William Villamizar Laguado apeló y el caso llegó al Consejo de Estado, el cual les dio la razón a los demandantes y tomó una decisión de fondo.
Varias voces en Cúcuta manifiestan que, como estrategia política, el mandatario se habría lanzado como gobernador al mismo tiempo que su hermano, para que pudieran escogerlo en caso de que el fallo del Consejo de Estado se diera antes de los comicios electorales.
Según con el Código Único Disciplinario, el mandatario departamental tendría tres meses de plazo para dejar el cargo. Esta situación ya se venía venir desde hace meses, pues la demanda ya se había hecho y sólo se esperaba que se diera el fallo.

