Se trata de John Uber, quien era el representante legal de la comercializadora Goldex, que según la fiscalía fue la de mayores inversiones registradas y por la cual fue capturado, este lunes resultó beneficiado con la ley que regula la medida de aseguramiento.

Las irregularidades que la fiscalía encontró y que lo están enredando, hablan de una cifra cercana a los $2,3 billones por medio de 6.000 empresas que sirvieron para mover el dinero por cuentas en el exterior, estos dineros provenía de actividades ilegales, además de la comercialización ilegal de oro.

A Uber le fueron imputados los delitos de lavado de activos, enriquecimiento ilícito y concierto para delinquir, pero al menos un año después de no arrancar el juicio en su contra, la defensa del sujeto acudió a la nueva ley que regula la medida de aseguramiento y solicitó el vencimiento de términos.

Por esta razón, el Juzgado 24 penal municipal de Medellín atendió los argumentos presentados por los abogados y lo dejó en libertad, mientras la Fiscalía utilizar los recursos legales para demostrar que hubo una estrategia para lograr la dilación de la investigación para beneficiar a Hernández.