Este jueves se conoció el caso de un niño de tres años fue raptado por una habitante de calle en el barrio La Fragüita, en el sur de Bogotá.

Según denunció la madre de la menor, ella y su esposo se encontraban parqueando el carro en la mañana cuando una habitante de calle se acercó al menor que jugaba con su hermana en la entrada de la casa y le ofreció un dulce y luego se lo llevó.

Inmediatamente, vecinos del sector se desplegaron por el barrio para buscar a la niña, quien apareció a ocho cuadras de la casa, cerca de la estación Hortua de TransMilenio.

De acuerdo con la madre, llegaron al lugar y vieron a la habitante de calle cubriéndole el rostro al niño con una cobija por lo que sospecharon de ella, quien aseguró en repetidas ocasiones que el niño era suyo hasta que la madre vio el rostro de su hijo, quien la reconoció y saltó a sus brazos.

Lo impresionante del caso es que en menos de una hora la mujer ya le había cambiado la ropa al menor, el cual portaba ropa de indigencia, su camiseta y pantalón estaban rotos y tenían un olor desagradable.

Cabe mencionar que la madre del niño tuvo que pagarle 20.000 pesos a la mujer para que le devolviera al niño.

Esto alerta a la ciudadanía porque esta podría convertirse en una nueva modalidad de los habitantes de calle para extorsionar a sus víctimas y conseguir dinero fácilmente.

Por su parte, la Policía se mostró sorprendida ante el caso porque no fueron notificados por la familia sobre esta desaparición.