Así lo confirmó el portavoz de la familia Rockefeller, Fraser P. Seitel, a varios medios de comunicación. De acuerdo con su declaración, su deceso se produjo mientras dormía en su domicilio de Pocantico Hills, en el estado de Nueva York.
El conocido banquero presidió durante años el Chase Manhattan Bank y fue fundador de la Comisión Trilateral, creada en 1973 y considerada una de las organizaciones privadas más influyentes del mundo. El reciente cálculo de la revista Forbes cifró su fortuna actual en USD 3.300 millones, lo que lo ubicó 581 de las personas más acaudaladas.
Durante su vida se reunió con más de 200 mandatarios en más de 100 países, donde su llegada tenía prácticamente el protocolo de una visita de Estado. Sin embargo, nunca postuló ni buscó un cargo público.
Fue también un férreo defensor del capitalismo. “El capitalismo estadounidense ha traído más beneficios a más gente que cualquier otro sistema en cualquier otra parte del mundo en la historia. El problema es verificar que el sistema corra eficiente y honestamente”, decía.
Nacido en Nueva York el 12 de junio de 1915, David era el último superviviente de su generación dentro del clan Rockefeller, uno de los grandes nombres del capitalismo.
Su abuelo, John D. Rockefeller, está aún considerado como el estadounidense más rico de todos los tiempos y como la persona más acaudalada de la historia moderna.
A David Rockefeller, el más joven de los seis hijos de John D. Rockefeller Jr., la revista Forbes le atribuía hoy pocas horas antes de conocerse su muerte una fortuna de 3.300 millones de dólares.
Con estudios en Harvard y Londres y doctorado en Ciencias Económicas por la Universidad de Chicago, Rockefeller entró en 1942 como voluntario en el Ejército y fue funcionario de inteligencia en Argelia y ayudante del agregado militar en París donde se licenció con el rango de capitán en 1945.
Al año siguiente ingresó como gerente adjunto del departamento internacional del Chase Manhattan Bank, una de las entidades financieras más grandes de Nueva York y en 1955 fue nombrado vicepresidente ejecutivo, antes de pasar a ocupar la presidencia en 1961.
En 1981, cuando tenía 65 años, abandonó el cargo en la entidad financiera tras asumir la iniciativa de su expansión a escala internacional.
Como filántropo, David Rockefeller se destacó por su apoyo a las artes y por financiar entre otros la creación del Rockefeller Center, el Museo de Arte Moderno de Nueva York, la Universidad Rockefeller o la construcción del World Trade Center.
Además, reunió una de las colecciones de arte más importantes del planeta con obras de Picasso, Cezanne y Matisse.
Durante sus últimos años, a pesar de su avanzada edad, mantuvo siempre una vida muy activa, con numerosos viajes y apariciones públicas.