Por segunda vez,la Penitenciaría El Bosque, en Barranquilla, se encuentra en la mira tras un operativo que realizó el Inpec el pasado 29 de julio en el que se incautaron varios elementos que darían cuenta de la realización de una parranda al interior del centro carcelario.

Al parecer, la fiesta habría sido organizada al empresario y exdirigente deportivo, Eduardo Dávila Armenta, quien fue condenado a 34 años de prisión por homicidio agravado.

De acuerdo con las autoridades, fueron incautados $700.000 en efectivo, un acordeón, una caja, una guacharaca y un bafle. También, cuatro botellas plásticas que en su interior contenían una sustancia líquida de color amarillo y con olor a licor.

Si las autoridades comprueban que se realizó una fiesta, a los internos se les abrirá un procedimiento que acarrearía la prohibición de las visitas de familiares o hasta la no redención de la pena.

Esta fiesta se sumaría a la polémica que causó hace un mes la realización del matrimonio de Alfonso López, el hijo de Enilce López en este centro carcelario.