“Por Altavista hay una preocupación muy grande por la violación de los Derechos Humanos. El 10 por ciento de los homicidios de Medellín ocurren en esta zona, son 30 personas que han sido asesinadas este año en el sector”, comentó este miércoles el Defensor del Pueblo, Carlos Alfonso Negret Mosquera, al recorrer el corregimiento de Medellín.

Negret Mosquera recogió las inquietudes y solicitudes de los habitantes de la región, en donde han ocurrido enfrentamientos entre los grupos armados conocidos como ‘los Chivos’ y ‘los Pájaros’.

El pasado 7 de julio la Defensoría del Pueblo emitió un informe de riesgo para la comuna 16 y el corregimiento Altavista, debido a que se han cometido homicidios selectivos, desplazamientos forzados, restricciones a la libertad, extorsiones y enfrentamientos con fusiles de largo alcance en medio de población civil en los barrios La Palma, La Esperanza y Nuevo Amanecer.

En esta zona ubicada al occidente de Medellín, en el primer semestre del 2017 han sido asesinadas 30 personas: nueve en Altavista; 20 en Belén y una en Belén Rincón.

Debido a la violencia, entre enero y mayo pasados al menos 76 personas, que conforman 21 familias, fueron desplazadas forzadamente, y se tiene conocimiento de núcleos familiares que están confinados.

“El confinamiento es una violación a los Derechos Humanos consiste en que en zonas rurales no dejan salir a las personas a cultivar y no los dejar salir a trabajar. Aquí es lo mismo, no dejan a los niños que salgan a estudiar y a los padres a trabajar, lo que genera una violación a los derechos humanos supremamente grave”, explicó el Defensor del Pueblo.

Además, hay víctimas de extorsiones o ‘vacunas’, sobre todo comerciantes y transportadores.

“El Estado debe llegar a Altavista de manera urgente e integral para que, de la mano con la comunidad, se le dé prioridad a la educación, la vivienda y la generación de ingresos. Y para mermar las estructuras armadas que tanto daño hacen en los barrios, que se brinden alternativas de reintegración social y mantener un trabajo constante de prevención de reclutamiento y vinculación a grupos armados”, afirmó el Defensor del Pueblo.

“Nosotros nunca nos hemos ido de Altavista, hemos estado aquí. Hemos presentado a las autoridades municipales y departamentales un informe de riesgo en el que advertíamos de lo que estaba pasando y lo que vamos a seguir haciendo es trabajar por estas comunidades y por la ciudadanía de Medellín, sobre la base y la órbita humanitaria que es la base nuestra y es la parte focal”, concluyó Negret Mosquera.