Ajustes a la política salarial y una reforma pensional integral, proponen empresarios al presidente Iván Duque
–En el marco de una propuesta general para la Reactivación Económica 2018-2022, el Consejo Gremial Nacional, que agrupa a los 21 gremios de la producción más representativos del país, propuso al presidente electo Iván Duque ampliar la brecha entre el salario mínimo y el salario medio, además de una reforma integral en materia de pensiones, que «respete los derechos adquiridos y que realice los ajustes paramétricos que correspondan».
Adicionalmente, al exponer el problema de la informalidad laboral, cuestionan el reciente cambio en el inicio de la jornada nocturna (de 10 p.m. a 9 p.m.), advierten que desincentiva a la generación de empleo formal y piden eliminar o reducir los sobrecostos que persisten con el fin de propiciar la formalización, en otras palabras, sustituir las contribuciones parafiscales que permanecen para el sistema de salud, el ICBF y el SENA.
Al respecto, sugieren presupuestar cada año un valor fijo, calculado como el promedio de los últimos 2 ó 3 años e indexado a la inflación.
En el documento, de 52 páginas, que fue entregado este miércoles al presidente electo Iván Duque, el Consejo Gremial Nacional comienza por proponer una reforma al sistema tributario, pues considera que el actual viola los principios de equidad horizontal y vertical y no contribuye a mejorar la distribución del ingreso.
Entre otras cosas, el Consejo Gremial plantea:
-Reducir la tarifa de renta corporativa.Ampliar el universo de personas naturales obligado a tributar.Eliminar exenciones y demás tratamientos preferenciales en el impuesto de renta.
-Establecer que el IVA en bienes de capital sea totalmente descontable del impuesto alas ventas en vez de ser deducible sobre el impuesto a la renta.
-Reglamentar la retención sobre utilidades introducida en la reforma tributaria del 2016.
-Suprimir impuestos obsoletos que complican la administración y contribuyen poco al recaudo.
-Eliminar las estampillas y prohibir la creación de nuevas.
-Fortalecer y simplificar el impuesto predial.
-Implementar un formulario único de pago nacional del ICA que permita a los empresarios hacer un solo pago, que posteriormente se dispersa a los respectivos municipios.
-Definir lineamientos nacionales que deben ser tenidos en cuenta por municipios y distritos en la aplicación de los instrumentos de financiación del desarrollo urbano y su destinación.
-Acelerar la reestructuración de la DIAN prevista en la reforma tributaria de 2016.
-Fortalecer la DIAN, con el fin que la entidad cuente con los procesos y competencias necesarios para luchar contra la evasión y la elusión.
-Acelerar el proceso de implementación de la factura electrónica para reducir los costos operativos y aumentar el control fiscal.
SALARIOS Y PENSIONES
Estas son las propuestas sobre el tema salarial y el régimen de pensiones:
Eliminar o reducir los sobrecostos que persisten con el fin de propiciar la formalización.
Para sustituir las contribuciones parafiscales que permanecen para el sistema de
salud, el ICBF y el SENA, se sugiere presupuestar cada año un valor fijo, calculado como el
promedio de los últimos 2 ó 3 años e indexado a la inflación. Valga decir, financiar dichos
programas con cargo a la tributación.
Evitar la estigmatizaciòn de la tercerización laboral. Es una figura ampliamente utilizada
a nivel mundial, alternativa clave para aumentar la productividad y competitividad de las
empresas. Debería censurarse únicamente cuando el empleador, a través de dicha figura,
evada obligaciones con sus empleados y colaboradores.
Establecer esquemas flexibles de contratación que se adecúen a las características
laborales de cada sector, a la creciente participación de la mujer en el mercado laboral
y a los nuevos hábitos de vida. Lo anterior con el fin de promover la formalización.
Ajustar la legislación a la nueva realidad del mercado laboral, en tanto las herramientas
tecnológicas traen consigo cambios en la naturaleza de las relaciones laborales, dando
paso a formas de trabajo más autónomas e independientes.
Otorgar estabilidad laboral reforzada solo a quienes tengan una condición de discapacidad
debidamente comprobada. En particular, cuando se cumpla alguna de las siguientes
condiciones: a) Una pérdida de capacidad laboral, debidamente calificada, entre el
15% y el 25%; b) Una incapacidad continua que, sin calificación de pérdida de capacidad
laboral, se prolongue por más de 180 días; c) Una enfermedad que pueda calificarse como
catastrófica, rara, huérfana o se trate de VIH, de conformidad con lo dispuesto por el Ministerio de Salud y Protección Social.
Fortalecer los canales formales de búsqueda de empleo y contratación, incluido el
Servicio Público de Empleo.
Ampliar la brecha que existe entre el salario mínimo y el salario medio. En la actualidad
dicha brecha se encuentra muy por debajo de lo observado en otros países de la región
(Consejo Privado de Competitividad, 2017). Su ampliación puede alcanzarse a través de
dos mecanismos: i) generando aumentos en la productividad, tanto laboral como empresarial, y ii) teniendo un crecimiento más controlado del salario mínimo.
SISTEMA PENSIONAL
Tras reseñar que el sistema pensional se caracteriza por su baja cobertura y que el modelo de pensiones es altamente inequitativo, proponen:
Adelantar una reforma integral, con un largo período de transición, que respete los
derechos adquiridos por los pensionados y las expectativas legítimas de quienes estén
próximos a jubilarse.
Ajustar el esquema cada 5 años, en función de los parámetros demográficos. Con ello
se le brinda seguridad de sostenibilidad al sistema y se minimizan los costos transaccionales que implica llevar periódicamente este tipo de reformas al Congreso.
Ajustar el ingreso base de liquidación, de tal manera que sea el promedio de los salarios
recibidos durante toda la vida laboral, independientemente de que este promedio sea
inferior o superior al promedio de lo recibido en los últimos 10 años.
Reducir gradualmente la tasa de reemplazo de los niveles de 65% a niveles acordes
con la sostenibilidad financiera del sistema.
Reducir el valor de la pensión al sobreviviente del 100% actual a una cifra entre 70% y 80%.
Fortalecer los mecanismos de inspección y vigilancia para identificar y hacer que los
ocupados que tengan capacidad de pago, efectivamente coticen al sistema.
Definir un único pilar contributivo que elimine el arbitraje entre regímenes y reduzca
las inequidades que se generan bajo un esquema multi-pilar. Un sistema de cuentas
individuales y contribución definida, en el que las pensiones sean proporcionales a lo que
cada trabajador ha cotizado, permitiría tener un sistema que no demande recursos del
presupuesto y que elimine los subsidios que actualmente se otorgan, en su mayoría a
personas de altos ingresos. En este escenario, Colpensiones podría competir como una
administradora más.
Garantizar, en el RAIS, que todos aquellos que cumplen con las semanas cotizadas a
la edad de pensión pero que no cumplen con el requerimiento mínimo de capital para
pensionarse, accedan al Fondo de Garantía de Pensión Mínima (FGPM) y obtengan una
pensión de 1 salario mínimo.
Fortalecer el programa de Beneficios Económicos Periódicos (BEPS) para que quienes
cotizaron al sistema contributivo y no lograron pensionarse, accedan al programa y
obtengan una renta vitalicia. El infortunado inamovible constitucional según el cual la
pensión no puede ser inferior al salario mínimo deja sin pensión a cerca del 50% de la
población. Las devoluciones de saldos e indemnizaciones sustitutivas se deben re-direccionar al programa de BEPS.
Robustecer y universalizar el programa Colombia Mayor. Debería funcionar como un
pilar solidario, en el cual las personas coticen para apoyar a quienes no pueden hacerlo.
En el programa debería ofrecerse, a los más vulnerables, subsidios iguales o ligeramente
mayores a la línea de pobreza.
SISTEMA EDUCATIVO
Complementariamente, advierten los empresarios que existe gran desarticulación entre los programas que ofrecen las instituciones educativas y las necesidades del mercado laboral. La oferta y demanda de habilidades no coinciden y el talento humano que se está formando no responde a las necesidades del aparato productivo. Dicha desarticulación obedece, entre otras cosas, a que el país no cuenta con encuestas de empleo por el lado de la demanda que permitan identificar los requerimientos de los diferentes sectores productivos (Fedesarrollo, 2016).
Estas son las propuestas:
Identificar, con la ayuda de los gremios, las competencias y habilidades necesarias en
cada sector productivo. Para lograrlo, podrían realizarse encuestas de demanda u organizarse mesas de trabajo en las cuales periódicamente se evalué el tema.
Construir planes de estudios flexibles y pertinentes, que involucren al sector privado,
con el fin de cerrar la brecha de habilidades. Es fundamental que el SENA se articule con el
sector privado y que haya una permanente rendición de cuentas por parte de este servicio,
financiado con aportes de los empresarios. Imperativo aislar al SENA del ciclo político y
propender por su excelencia técnica.
Capacitar de forma permanente a los profesores. Contar con docentes de calidad y a
la vanguardia del conocimiento implica evaluar permanentemente y de forma integral la
calidad de la planta académica.
Profundizar la formación dual. Se deben establecer nuevas alianzas con las empresas para
combinar el aprendizaje de competencias técnicas en el aula con las que se desarrollan en
el puesto de trabajo.
Actualizar los métodos de enseñanza. En la era de revolución digital, es imperativo adoptar
las nuevas tecnologías como herramientas para flexibilizar y modernizar los espacios y la
forma cómo se enseña.
Diseñar y realizar programas de capacitación y entrenamiento al interior de las
empresas.
Establecer la enseñanza en TICs como prioridad desde la política pública. Se debe
fomentar la inversión en infraestructura TIC y ampliar la cobertura en la prestación de
estos servicios en todo el país. Con el fin de transmitir los beneficios de las TIC a toda la
población, es esencial asignar subsidios a la demanda en los estratos más bajos que no
cuentan con la capacidad económica para acceder a ellos.
Implementar el Plan Nacional de Bilingüismo, en concordancia con las necesidades de
las empresas.
Fortalecer la educación financiera dentro de los planes de estudio en los colegios. Es
importante iniciar esta estrategia durante los primeros años de educación con el fin de
desarrollar hábitos responsables y duraderos sobre el manejo de los recursos financieros.
Hacer énfasis en la cobertura y calidad de la educación dirigida a la ruralidad debido a las
grandes brechas frente a los centros urbanos.