–Un caleta subterránea que contenía un poderoso arsenal la banda disidente de las Farc de alias «guacho», fue localizada por tropas del Ejército Nacional en el departamento de Nariño, en lo que el mando militar considera un nuevo y certero golpe a la citada organización ilegal.

Con el hallazgo de armamento, comunicaciones y material para la elaboración de explosivos, se logra neutralizar acciones terroristas y delictivas del grupo armado organizado residual “Oliver Sinisterra”, asegura el Comando del Ejército.

La Fuerza Tarea Conjunta Hércules, a través de su componente Ejército Nacional, en el marco de la Campaña Militar y Policial ‘Atlas’, halló el depósito ilegal subterráneo construido en estructura de cemento, en el sector de conocido como Mataje, en zona rural del municipio de Tumaco, ubicado en la costa Pacífica sur de Colombia.

En la caleta se encontraron 14 fusiles, 48 mil 452 cartuchos de munición de diferentes calibres, cinco cartuchos antiblindaje para fusil de alta precisión calibre 7,62 milímetros, 21 canecas con 764.5 kilos de pentolita, 55 granadas de mano, 85 granadas de 40 milímetros, 54 granadas tipo piña, 381 proveedores para fusil de diferente calibre, 60 minas antipersona, 18 artefactos explosivos improvisados, 460 detonadores eléctricos, 218 municiones de fabricación improvisada, 25 detonadores aneléctricos, 2.100 metros de cordón detonante, seis radios de comunicaciones y 40 baterías de 9 voltios.

El hallazgo de este material de la banda disidente de las Farc, estructura narcoterrorista bajo el mando delictivo de Walter Patricio Arizala, más conocido por el alias de «guacho», demuestra el compromiso de las Fuerzas Militares que día a día seguirán adelantando operaciones contra estos grupos al margen de la ley, hasta lograr su neutralización o sometimiento a la justicia, precisa el comunicado.

De esta manera las Fuerzas Militares, Policía, CTI y Fiscalía mantendrán la ofensiva contra los grupos armados organizados y los diferentes fenómenos de criminalidad que afectan la seguridad y la convivencia pacífica de los colombianos en el sur occidente del país, concluye..