Nicolás Maduro, junto al alto mando militar, inauguró este miércoles las maniobras militares en frontera, que se prolongarán hasta el 30 de agosto.

En esta inauguración,Maduro aprovechó la apertura de la jornada para culpar a Estados Unidos del apagón masivo que sufrió el país el lunes, y lo atribuyó al «desespero» de Washington por no haber logrado sacarlo del poder.

Maduro reiteró que el corte que afectó a todo el país se debió a un «ataque electromagnético de alta factura tecnológica».

El causante del corte «es el imperialismo norteamericano desesperado por sus derrotas en Venezuela», denunció el mandatario socialista junto al alto mando militar en una transmisión obligatoria de radio y televisión.

Estados Unidos lidera la presión internacional para expulsar a Maduro y que sea sustituido por el líder opositor Juan Guaidó, reconocido como presidente encargado de Venezuela por medio centenar de países.

El pasado lunes, Caracas y los 23 estados del país quedaron a oscuras por una falla en la central hidroeléctrica de Guri, fuente de 80% de la energía que consume Venezuela. La situación impactó los servicios de transporte, agua y las comunicaciones telefónicas.

El sistema eléctrico ha sufrido «decenas de ataques» en los últimos cuatro meses, alegó Maduro, y sostuvo que la emergencia ya ha sido superada en un «alto nivel». «No han podido ni podrán con la unión, la lealtad y la cohesión de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, y eso los desespera», insistió.

Ejercicios militares en frontera
Maduro dijo que los ejercicios militares, denominados Campaña Libertadora Simón Bolívar 2019, se hacen «en homenaje» a Bolívar y a la Armada, así como del fallecido presidente Hugo Chávez.

«Vamos a probar diversos armamentos que tiene Venezuela, de primer nivel del mundo», dijo el gobernante, quien señaló que Venezuela «es un país de paz» y que «respeta al mundo entero».

Al mismo tiempo, advirtió que su país cuenta con «una poderosa Fuerza Armada y tenemos la voluntad de defensa de lo que es nuestro».