Como resultado de la visita de la misión de Skane, Suecia a Colombia, los delegados de este país lograron acuerdos fundamentales con la RAP-E Región Central para mejorar la economía del campo en el centro del país.
Los acuerdos están dirigidos a la integración de Especialización Inteligente para el Plan de Abastecimiento Alimentario que viene formulando la RAP-E; proyectos de economía circular en la cadena de abastecimiento de alimentos y mayores garantías para los productores en el proceso de la comercialización de sus productos.
Durante una semana las delegaciones de Suecia y la RAP-E Región Central de Colombia sostuvieron varios encuentros con productores, gremios, empresarios, academia y autoridades locales y recorrieron sus fincas, plantas de producción y obras estratégicas dispuestas en el centro del país para la oferta agroalimentaria como el Centro Agroindustrial de Villa Pinzón, Cundinamarca; el Parque Agroalimentario de Tunja, la Central de Beneficio y la Planta de Transformación de Cacao de San Pablo de Borbur en Boyacá, y Distrito Chocolate en Bogotá, entre otros.
“Hemos llegado a unos acuerdos muy importantes en el marco de la Cooperación, entre ellos el fortalecimiento a la formulación del Plan de Abastecimiento Alimentario con iniciativas que integran la innovación y la tecnología, experticia del país nórdico. De ahí vendrán proyectos muy importantes como la asistencia técnica a papicultores y alternativas sostenibles para el diseño de empaques; entre otros. Esperamos que un año estemos entregando productos concretos para nuestros departamentos y la capital”, anunció Fernando Florez, Gerente de la RAP-E.
El primer acuerdo logrado entre las delegaciones de Colombia y Suecia corresponde a la Implementación del Plan de Abastecimiento Alimentario con Open Innovation Arenas. (Especialización inteligente), de tal manera que la experiencia y avances en materia de innovación de Suecia sea incluida este Plan que viene formulando la RAP-E y se logre aumentar el valor agregado de los productos que se están cultivando en el centro del país.
“Queremos transferir conocimiento y conectarlos con la academia. Muchas organizaciones suecas trabajan en torno a la investigación y al desarrollo de productos más competitivos y que acercan a todos los actores de la cadena de abastecimiento. Podremos transferir conocimiento para la Región Central y trabajar en áreas de especialización inteligente a través de capacitaciones en los dos países”, explicó Mirka Fahlander, una de las integrantes de la misión.
Con relación al desarrollo de la economía circular en la cadena de abastecimiento de alimentos, se acordó trabajar de acuerdo al avance que ha logrado Suecia en el campo logístico con nuevas técnicas y alternativas sostenibles para el diseño de empaques, así como la implementación de nuevas estrategias para reducir los índices de pérdidas y desperdicios de alimentos en la región, pues cada año se desperdician 1´703.371 toneladas de comida y se pierden 1´854.842 toneladas de víveres.
Elin Aronsen Beis, co-fundadora y directora ejecutiva de Foodloopz Sweden AB, una empresa reconocida por innovar en la reducción de los desperdicios de comida sostuvo: “ustedes tienen campesinos que quieren hacer un cambio y que necesitan plataformas de información y nuevas estrategias para reducir los desperdicios de alimentos, es importante que podamos actuar de puente con varias empresas suecas”.
Otro de los puntos clave del resultado de este encuentro, corresponde al mejoramiento de la posición de los productores vinculados al comercio, a través de cual se dará el reconocimiento y la posición que merecen los campesinos dentro del mercado.
Katarina Gillblad, creadora de la reconocida empresa Agronomics Scandinavia AB, que revolucionó el acceso de los trabajadores del campo de Suecia al comercio, enfatizó que el cierre de la brecha entre los campesinos y el mercado permitirá la implementación de proyectos de alto impacto que incrementen la competitividad, y en ello trabajarán. “Estoy muy impresionada por el proyecto la Asociación de productores de papa de Villa Pinzón, porque dar la oportunidad a los campesinos de poder lavar la papa de sus asociados sin tener que transportarla a otras partes es un gran paso, ya que se está reduciendo la cadena de intermediación, además ellos quieren tener una fábrica para procesar almidón y utilizar las papas que se desperdician lo cual es una idea brillante. En Suecia le estamos apostando a esto porque el almidón es algo que se incluye en los bioplásticos”, sostuvo.