Salud

Influenza: mitos de una enfermedad respiratoria contagiosa pero prevenible

El virus de la influenza vive en el ambiente, es altamente contagioso y, para algunos, puede resultar en una enfermedad grave e incluso letal. Lo que muchos no saben es que la infección por este virus es prevenible a través de la vacunación y las medidas de protección respiratoria, lo cual permite disminuir el número de casos y las complicaciones . No obstante, existen mitos alrededor de la enfermedad y la vacunación, la clave es derribarlos.

¿Qué es la influenza?

Es una enfermedad respiratoria contagiosa, provocada por los distintos virus que reciben el mismo nombre y que infectan la nariz, la garganta y, en algunos casos, los pulmones. Puede causar padecimientos leves o graves y en ocasiones puede llevar a la muerte.

Anualmente, la influenza causa cerca de 650.000 muertes en el mundo², de las cuales 111.500 corresponden a niños menores de 5 años.³ Frente a este panorama, las autoridades médicas a nivel global recuerdan que la mejor manera de prevenir la aparición de la influenza es vacunándose todos los años, junto con las medidas de protección respiratoria.

Generalmente, la influenza aparece de forma repentina y las personas contagiadas pueden presentar síntomas como tos, fatiga, dolor en músculos y articulaciones, dolor de cabeza, dolor de garganta, secreción nasal, fiebre y escalofríos.²

Este virus se propaga de manera fácil y rápida, especialmente en lugares concurridos y cerrados como colegios o asilos. Al igual que los demás virus que afectan el sistema respiratorio, la influenza se transmite ágilmente en las partículas dispersas en el aire, derivadas de la tos y los estornudos, en espacios menores de 1 o 2 metros de distancia.

A pesar de que puede afectar a cualquier ser humano, ciertos grupos poblacionales presentan un mayor riesgo, como las mujeres embarazadas, los niños entre 6 meses y 5 años, los adultos mayores de 65 años, las personas con condiciones médicas crónicas y los profesionales de la salud.

Luz Elena Moreno, Gerente Médica de Vacunas para GSK, mencionó: “los profesionales de la salud, hoy más que nunca, son una de las poblaciones con mayor riesgo de contagio no solo de COVID-19 sino también de otras infecciones respiratorias que son prevalentes en esta época del año. Por eso, GSK entregó al Ministerio de Salud 20.000 dosis de vacunas contra la influenza para proteger a estos profesionales en Colombia”.

Mitos y realidades

Aunque no existe claridad sobre el momento exacto en el que las primeras personas contrajeron influenza, en el inicio del siglo pasado se logró documentar que era ocasionada por un virus.

Esta enfermedad, altamente contagiosa, no ha podido ser controlada a nivel global debido a la facilidad con que el virus muta, apareciendo nuevas variantes en cada subtipo .

Teniendo en cuenta que esta enfermedad causa un número significativo de muertes en el mundo² y afecta de manera importante a poblaciones infantiles y de riesgo¹, existen algunos mitos que debemos conocer y derribar.


1. La vacuna contra la influenza debilita el sistema inmunológico: FALSO

De hecho, la vacuna puede ayudar a preparar al sistema inmune para luchar contra el virus de la influenza al producir anticuerpos (defensas) en el sistema del paciente.

2. La influenza es peligrosa únicamente si se es adulto mayor: FALSO

La influenza puede afectar a cualquier persona y no solo a los adultos mayores. Existen además otras poblaciones de riesgo como mujeres embarazadas, niños menores de 5 años y personas con enfermedades crónicas. La influenza puede suponer riesgos importantes para la salud de todas estas personas, por eso se recomienda la vacunación entre los mecanismos de prevención.²

3. La influenza igual que un resfriado: FALSO

No. Pese a la creencia popular, la influenza es peor que un resfriado común y los síntomas son más intensos y frecuentes. Los resfriados generalmente no derivan en problemas serios de salud como neumonía, infecciones bacterianas y hospitalizaciones.?

4. Las vacunas contra la influenza no funcionan: FALSO

Las vacunas contra la influenza funcionan. Su impacto puede variar cada año, sin embargo, la vacunación sigue siendo el método más efectivo para prevenir la influenza o reducir su severidad, y es recomendada por importantes organizaciones internacionales junto con los demás métodos de prevención.²

5. Las vacunas pueden producir la influenza: FALSO

No, las vacunas contra la influenza no provocan esta enfermedad. La vacuna está compuesta por fragmentos de virus que no se encuentran activos. Esto significa que no son infecciosos y no podrían producir la enfermedad. ¹¹

6. La vacuna contra la influenza causa malestar intenso: FALSO

Realmente no. Las reacciones más comunes luego de recibir la vacuna son dolor o inflamación en el sitio de la inyección. Otras reacciones pueden incluir fiebre leve o dolor en los músculos. A veces, estos eventos son confundidos con la influenza, y generalmente desaparecen a los pocos días sin necesidad de ningún tratamiento.

7. Si ya recibió la vacuna el año anterior, no necesita vacunarse de nuevo este año: FALSO

Esto no es cierto. Los virus que causan la influenza pueden variar cada año, y la respuesta inmune disminuye con el tiempo. Por eso, la vacuna contra esta enfermedad es reformulada anualmente, derivado del pronóstico en los cambios de los virus de influenza, por lo que sí se recomienda recibir cada año esta vacuna.¹¹

8. Los antibióticos pueden tratar la influenza: FALSO

A pesar de que los antibióticos son una manera eficiente para tratar las infecciones bacterianas, la influenza no es producida por bacterias sino por un virus. Por tal razón, los antibióticos no pueden hacer nada para combatirla.

Ante cualquier inquietud o consulta sobre la influenza, recuerde que la recomendación es siempre consultar a su médico de cabecera.