BioNTech está trabajando a fondo con su socio Pfizer para impulsar la producción de su vacuna contra el COVID-19, dijeron sus fundadores, advirtiendo que habría brechas en el suministro hasta que se implementen otras vacunas.
La startup de biotecnología alemana ha liderado la carrera por las vacunas, pero su inyección ha tardado en llegar a la Unión Europea debido a la aprobación relativamente lenta del regulador de salud del bloque y al pequeño tamaño del pedido realizado por Bruselas. Los retrasos han causado consternación en Alemania, donde algunas regiones tuvieron que cerrar temporalmente los centros de vacunación días después del lanzamiento de una campaña de inoculación el 27 de diciembre.
“Por el momento no se ve bien, está apareciendo un agujero porque hay falta de otras vacunas aprobadas y tenemos que llenar el vacío con nuestra propia vacuna”, dijo el director ejecutivo de BioNTech, Ugur Sahin, al semanario de noticias Spiegel en una entrevista.
BioNTech espera lanzar una nueva línea de producción en Marburgo, Alemania, antes de lo programado en febrero, con el potencial de producir 250 millones de dosis en la primera mitad de 2021, dijo Sahin.
También se están celebrando conversaciones con los fabricantes por contrato y debería haber mayor claridad a finales de enero.
El ministro de Salud, Jens Spahn, dijo en Twitter que las autoridades alemanas harían todo lo posible para habilitar un inicio rápido en Marburgo.
El gobierno federal, que ha respaldado a BioNTech con 375 millones de euros (458 millones de dólares) en financiación, se ha resistido a los llamados de los líderes de la oposición para acelerar la producción de su vacuna mediante la emisión de licencias obligatorias a otros fabricantes de medicamentos.
Se espera que una vacuna de Moderna sea aprobada por la Agencia Europea de Medicamentos (EMA) el 6 de enero. El ministro de Salud alemán, Jens Spahn, ha instado a la EMA a que también apruebe rápidamente una vacuna desarrollada por la Universidad de Oxford y AstraZeneca que Gran Bretaña aprobó esta semana. El cronograma de la UE para ese tratamiento sigue siendo incierto.
Sahin dijo que la vacuna BioNTech/Pfizer, que utiliza ARN mensajero para instruir al sistema inmunológico humano para combatir el coronavirus, debería poder hacer frente a una variante detectada por primera vez en Gran Bretaña que parece ser más contagiosa. “Estamos probando si nuestra vacuna también puede neutralizar esta variante y pronto sabremos más”, dijo. Cuando se le preguntó sobre cómo hacer frente a una mutación fuerte, dijo que sería posible modificar la vacuna según sea necesario dentro de seis semanas, aunque estos nuevos tratamientos podrían requerir aprobaciones regulatorias adicionales. Reuters