Juliette de Rivero, representante en Colombia de la Alta Comisionada de la ONU para los Derechos Humanos aseguró que «Negar» o «minimizar» los crímenes extrajudiciales cometidos por militares contra civiles, llamados «falsos positivos», es «socavar» la «búsqueda de la verdad».

Esa y otras afirmaciones las hizo hoy en el Legislativo la delegada de la ONU, durante la condecoración con la Orden del Congreso de la República en el grado comendador a la Fundación Madres Falsos Positivos Soacha y Bogotá, en el día internacional de la mujer.

El colectivo congrega a las mujeres que perdieron a hijos, esposos y padres de barrios pobres, algunos incluso con discapacidades, que fueron engañados con supuestas ofertas de trabajo, luego asesinados y presentados como «bajas en combate» por parte de unidades del Ejército, para dar la impresión de falsos triunfos en la lucha contra los grupos guerrilleros.

En su intervención, de Rivero recordó que su oficina hace seguimiento del tema desde 1998, de manera que se conoce la «gravedad de lo ocurrido» y se han hecho recomendaciones al Estado colombiano para prevenir y resolver estos crímenes.

«Es importante avanzar con la verdad y el esclarecimiento de los denominados «falsos positivos», reclamó la delegada de la ONU, al tiempo que reconoció los «esfuerzos» de la Jurisdicción Especial para la Paz (JEP) para precisar y judicializar esos crímenes.

El pasado 18 de febrero, la JEP reveló que los crímenes extrajudiciales cometidos por los militares, entre 2002 y 2008, durante el gobierno de Alvaro Uribe (2002-2010), triplicaban la cifra hasta entonces oficial de 2.248 que tenía la Fiscalía.

La revelación de 6.402 civiles asesinados fue criticada, entre otros, por el presidente, Iván Duque, cuyo mentor político es Uribe, al asegurar que toda información requería de «soporte probatorio» y que esperaba que la justicia se pronunciara con «providencias» y «no en los micrófonos».

Para de Rivero «negar lo que ocurrió o intentar minimizar su amplitud es socavar la rendición de cuentas y la búsqueda de la verdad», puntualizó.

También reclamó «garantías» para los parientes de las víctimas y «preservar la autonomía y la independencia» de la JEP, a fin de que pueda cumplir con los objetivos que le trazó el acuerdo de paz, de dar a conocer y juzgar los crímenes de la guerra interna de medio siglo.

«El esclarecimiento completo -judicial y extrajudicial- y la sanción de los máximos responsables fomentarán la consolidación de la paz, el Estado de Derecho y la democracia», argumentó la delegada de la Oficina a cargo de la expresidente chilena Michelle Bachelet.

«Hace 13 años arrebataron los sueños de nuestros hijos, hermanos, esposos y desde ese momento no hemos parado de luchar.

Hoy desde el congreso queremos seguir hablando fuerte y claro.
¿Quién dio la orden?», reclamaron este lunes en Twitter las Madres de Falsos Positivos de Colombia.