Nuevo Papa León XIV: Sus primeras palabras fueron un mensaje a la «unidad de todos para ser un único pueblo»
–En sus primeras palabras ante la multitud que se congregó en la plaza San Pedro del Vaticano, el nuevo Papa León XIV envió un claro mensaje de unidad y conciliación, que parece ir en línea con la gestión de su predecesor.
«La humanidad necesita a Cristo como el puente para ser alcanzados por Dios y por su amor, para ayudarnos a construir puentes mediante el diálogo, uniéndonos todos para ser un único pueblo», indicó en medio del júbilo de los fieles.
También proclamó: «Todos estamos en manos de Dios, por lo tanto, sin miedo, todos unidos de la mano de Dios y entre nosotros, avancemos. Seamos discípulos de Cristo. Cristo nos precede, el mundo necesita su luz. La humanidad le necesita como el puente para ser alcanzados por Dios y su amor».
Y exhortó a la comunidad católica a «construir puentes, mediante el diálogo y el encuentro, para ser un único pueblo, siempre en paz».
El nuevo pontífice también dio las gracias a Francisco y a los cardenales que le eligieron para llevar el rumbo de una «iglesia unida» que proclamen el evangelio «para ser misioneros». «Soy un hijo de san Agustin», recalcó.
El Papa León XIV se asoma al balcón central de la Basílica de San Pedro para impartir la bendición "Urbi et Orbi" y pronunciar sus primeras palabras como Obispo de Roma. pic.twitter.com/xXieXhGH9w
— Vatican News (@vaticannews_es) May 8, 2025
Prevost fue nombrado por Francisco como prefecto del dicasterio para los obispos en enero de 2023, una poderosa posición responsable de seleccionar a los obispos, cargo que ocupó hasta la muerte de su antecesor. Luego, el 30 de septiembre de 2023, fue elevado por el papa argentino al rango de cardenal.
De manera sorpresiva, León XIV envió un mensaje en español a la diócesis de Chiclayo, Perú, que encabezó durante varios años por mandato de Francisco.
«En modo particular a mi querida diócesis de Chiclayo en Perú, donde un pueblo fiel ha acompañado a su obispo, ha compartido su fe y ha dado tanto, tanto, para seguir siendo iglesia fiel de Jesucristo», dijo.
El cardenal Robert Prevost tiene una larga relación con Perú, a donde llegó en noviembre de 2014, cuando Francisco lo nombró administrador apostólico de la diócesis de Chiclayo y poco después, obispo.
Este es el texto integral en español de la intervención del nuevo pontífice:
¡La paz esté con vosotros!
Queridísimos hermanos,
Éste es el primer saludo de Cristo Resucitado, el Buen Pastor que dio la vida por el rebaño de Dios. Yo también querría que este saludo llegase a todas las familias, a todos los pueblos, a toda la tierra: la paz esté con vosotros.
Esta es la paz de Cristo resucitado, una paz desarmada y desarmante, humilde y perseverante. Proviene de Dios, que nos ama a todos de manera incondicional.
Seguimos conservando la voz débil pero siempre valiente del Papa Francisco que bendijo a Roma y daba su bendición al mundo entero esa mañana del día de Pascua. Permitidme seguir esa bendición. Dios nos ama a todos incondicionalmente y el mal no prevalecerá.
Todos estamos en manos de Dios, por lo tanto, sin miedo, todos unidos de la mano de Dios y entre nosotros, avancemos. Seamos discípulos de Cristo. Cristo nos precede, el mundo necesita su luz. La humanidad le necesita como el puente para ser alcanzados por Dios y su amor.
Vosotros, construid puentes, mediante el diálogo y el encuentro, para ser un único pueblo, siempre en paz.
Gracias al Papa Francisco. También quiero dar las gracias a todos los hermanos cardenales que me han elegido para ser el sucesor de Pedro y caminar con vosotros como iglesia unida, buscando siempre la paz y la justicia y trabajar como hombre y mujeres, fieles a Jesucristo. Sin miedo para proclamar el Evangelio, para ser misioneros.
Soy un hijo de San Agustín, que dijo «soy cristiano y por vosotros, obispo» en este sentido podemos caminar juntos hacia la patria que nos ha preparado Dios.
Dirijo un saludo especial a la Iglesia de Roma. Debemos buscar juntos cómo ser una iglesia misionera que construya puentes y diálogo. Siempre abierta a recibir a todos, como esta plaza con los brazos abiertos. A todos los que necesitan nuestra caridad, nuestra presencia, el diálogo y el amor.
Si me permiten también, un saludo a todos aquellos, en particular, a mi querida diócesis de Chiclayo en el Perú. Donde un pueblo fiel ha acompañado a su Obispo, ha compartido su fe y ha dado tanto, tanto para seguir siendo Iglesia fiel de Jesucristo.
A todos vosotros, hermanos del mundo, queremos ser una Iglesia sinodal, que camina y busca siempre la paz y la caridad y estar cerca sobre todo de aquellos que sufren.
Hoy, el día de la súplica a la Virgen de Pompeya, nuestra madre María quiere caminar con nosotros, ayudarnos con su intercesión y su amor.
Oremos juntos por esta nueva misión, por toda la Iglesia y por la paz en el mundo. Pedimos esta gracia especial a María, Nuestra Madre.