Para que responda por sus presuntos vínculos con grupos paramilitares y la muerte de un campesino del Chicó, a quien señalaron de pertenecer a la guerrilla, la Fiscalía General de la Nación dictó medida de aseguramiento, sin beneficio de excarcelación, contra el ex general de la Brigada 13, Rito Alejo del Río.

Para la Fiscalía -pese a que el ex general ya había sido absuelto cuatro años atrás- existen hoy las suficientes pruebas que comprometen al ex militar en actividades ilícitas, por lo que fue acusado del delito de homicidio en persona protegida y conformación de grupos de justicia privada.

En la providencia en la que la Fiscalía lo asegura y le niega cualquier beneficio que implique su excarcelación, se aclara que los testimonios de los desmovilizados paramilitares Hebert Veloza, Jorge Iván Laverde Zapata y Salvatore Mancuso, son coincidentes al afirmar que el general en retiro sí colaboró con las desmovilizadas Autodefensas Unidas de Colombia.

Los delitos habrían sido cometidos por el entonces oficial activo, cuando se desempeñaba como Comandante de la XVII Brigada del Ejército, con radio de acción en los municipios de Mutatá, Chigorodó, Apartadó, Turbo, Necoclí, San Juan, Arboletes, San Pedro de Urabá, Unguía y Acandí.