Prevención del reclutamiento forzado y de violencia sexual son los ejes centrales de Pueblos en Movimiento, una estrategia implementada por el Ministerio de Justicia en alianza con Fupad y la Fundación Círculos de Estudios, que benefició este año a 300 niños y niñas en Chocó.

En el marco de las actividades de cierre del proyecto, el Ministerio de Justicia y del Derecho se hizo presente en el norte de Quibdó, en una de las comunidades más vulnerables de esa ciudad, en los barrios Villa España y Samper, para entregar regalos a los más de 300 niños con quienes durante todo el 2014, se implementó la estrategia de apoyo psicosocial y Derechos Humanos a través de las danzas.

“A través de estas estrategias estamos arrebatándole los niños a la violencia», señaló el Viceministro de Política Criminal, Miguel Samper Strouss, quien mencionó que este tipo de acciones deben replicarse, y que pequeñas acciones de cada ciudadano pueden generar grandes impactos en las comunidades. «La mejor y más efectiva política criminal es la que previene tempranamente la criminalidad», aseguró el alto funcionario.

Una quinta parte de los menores que participaron de este programa han sido víctimas de algún tipo de agresión sexual o de la amenaza de los grupos al margen de la Ley. Se considera que por encima de un 80 por ciento aún está en situación de riesgo por cuenta de los grupos guerrilleros y de bandas criminales que delinquen en la región. “Los niños debemos cuidarnos de la violencia”, dice una de las menores beneficiarias del Programa.

Según el Ministerio de Justicia, esta iniciativa dirigida a poblaciones afectadas por el conflicto armado es una puerta de entrada para que los niños, niñas y adolescentes encuentren proyectos de vida alternativos al conflicto armado.

“La danza es un gancho para atraer a los jóvenes a estos procesos. La danza nos permite poder hacer un acompañamiento más efectivo, porque vamos a dialogar desde su propia realidad y su propio contexto”, dijo Nohora Álvarez, directora de la Fundación Círculos de Estudios Culturales y Políticos.

Finalmente, aprovechando su presencia en Quibdó, el Ministerio de Justicia y del Derecho, junto con FUPAD y líderes comunitarios, atravesaron los ríos Atrato y Quito para visitar la comunidad ribereña de La Soledad. Allí, unos 120 niños recibieron atención social por parte del Ministerio y la Fundación.