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Corrupción en Colombia es baja según informe de Transparencia Internacional

La corrupción en América Latina mantiene sus graves dimensiones en sólo dos países -Venezuela y Haití -, mientras que Chile, Uruguay y Costa Rica sacan un «aprobado» en el Índice de Percepción de la Corrupción, presentado hoy en Berlín por Transparencia Internacional. Colombia aparece en el grupo de las naciones en donde el fenómeno es bajo.

Colombia se ubicó en el puesto 70 entre 180 países medidos por el Índice de Percepción de la Corrupción (IPC) 2008 elaborado por Transparencia Internacional, entidad que se quejó de que los países ricos también mostraron grandes retrocesos este año por sus escándalos corporativos permanentes.

Un año antes Colombia se encontraba en el puesto 68 con 3,8 puntos en la medición, la misma que conservó para este año y que coloca al país como moderadamente corrupto y la mitad de transparente que por ejemplo, Estados Unidos, y una tercera parte menos transparente de Dinamarca, el menos corrupto.

El IPC, que diagnostica la corrupción en 32 países del continente americano, refleja que muchos de los programas que aplican los gobiernos latinoamericanos con el fin de combatir la corrupción han fracasado, según puede leerse en el informe.

La propia presidenta de TI, Huguette Labelle, que destacó los esfuerzos realizados por países como Chile, a donde viajó recientemente la presidenta de TI, apuntó que «la población espera a ver si los gobiernos realmente llevan a la práctica las medidas anti-corrupción que prometen».

Chile, considerado junto con Uruguay, el país menos corrupto del continente americano, por detrás de Canadá y EEUU, pero por delante de Eslovenia, Estonia o España, se coloca en el puesto 23 de entre los 180 países que supervisa Transparencia Internacional.

Durante los últimos años, el crecimiento económico superior al cinco por ciento en el subcontinente, no ha mermado la desigualdad económica, y son las familias menos adineradas las que tienden sin embargo a pagar con mayor frecuencia sobornos, a costa de los magros ingresos familiares, concluye el documento.

Juanita Riaño, responsable de investigación de TI, habló de un «estancamiento» en la batalla contra la corrupción en América, como refleja el hecho de que «de los 32 países que recoge el índice, 22 estén por debajo de cinco puntos» (en una escala del uno al diez, donde diez sería el menos corrupto), apuntó.

Cifró los problemas Riaño en «el sistema judicial, los servicios públicos y la captura del estado por parte del sector privado».

Labelle por su parte considera que en países con una riqueza de materias primas como Chile, su población tarda en percibir «si un gobierno emprende medidas serias contra la corrupción o no», ya que esperan a ver si esos recursos enriquecen o no a sus habitantes.

Riaño apuntó, además, que el IPC de Transparencia Internacional funciona como un «semáforo» o una llamada de atención, pero no identifica las instituciones corruptas, para los que TI elabora otros barómetros, como el Índice de Fuentes de Soborno.

El Informe sobre Corrupción Global de 2007 ya reveló que la menor confianza en el poder judicial se registra en América Latina, con un 73 por ciento de los encuestados en diez países convencidos de que el sistema judicial de su país es corrupto.

En el IPC 2008 son Chile, Costa Rica, Cuba, Perú, México, Panamá, Guatemala, Bolivia y Honduras, donde se registra una ligera mejoría a la hora de combatir esta lacra o así lo perciben sus habitantes.

Y es en Uruguay (pese a estar entre los 25 países menos corruptos del mundo), El Salvador, Nicaragua, Ecuador y Venezuela, donde se percibe un empeoramiento con respecto a 2007.

Este índice, que se publica anualmente desde 2005, analiza la corrupción en el sector público basándose en evaluaciones de expertos y en encuestas de opinión recogidos hasta junio de este año y, por tanto, «los efectos del referendo y la crisis de gobierno en Bolivia no se verán hasta el próximo IPC», destacó Riaño.

En 2004, el 43 por ciento de los latinoamericanos admitió que contaba con que la corrupción creciera en los próximos tres años, según el Barómetro de Corrupción Global que también confecciona TI.

Y aunque Latinoamérica y el Caribe han adoptado convenciones anti-corrupción y otros instrumentos legales en la lucha contra la corrupción, muchos países fallan a la hora de «implemantarlos», concluye el informe de 2008.

En lo que respecta a Norteamérica, la situación en Estados Unidos no ha mejorado durante los últimos tres años. Con 7,3 puntos sobre 10, ocupa el puesto 18, a la cola entre los países industrializados, pero antes que Chile y Uruguay (que comparten el puesto 23).

El informe asegura que se extiende la sensación en EEUU de que la política financiera necesita de amplias reformas, para frenar la influencia de los «lobbies» y grupos de interés en la política.

El alumno ejemplar del continente es Canadá, ya que con un noveno puesto se coloca entre los diez menos corruptos del mundo.