Elecciones Política

Precandidatos insisten en que Uribe defina si va por reelección en 2010

petro y pardoLos candidatos a la Presidencia de la República pidieron al primer mandatario que se decida si va o no por la reelección de este año.

El candidato independiente Sergio Fajardo, aseguró que no cree que Uribe se vaya a presentar a unas nuevas elecciones, “pero es muy hábil al mantener esa incertidumbre sobre su participación pues evita que el país comience a hacer un análisis riguroso de lo realizado por su gobierno».

Por su parte, el candidato presidencial de izquierda, Gustavo Petro, acusó a Uribe de «querer confundir al país modificando la frase ‘A Dios lo que es de Dios y al César lo que del César'».

A cinco meses de las elecciones presidenciales, la falta de definición sobre si Uribe, en el poder desde agosto de 2002, aspirará a un nuevo periodo, mantiene paralizado el debate electoral, además de que su partido la U se abstiene de formalizar una candidatura.

Este «mensaje ambivalente» de Uribe fue rechazado el miércoles por el ex mandatario liberal César Gaviria. «La estrategia del presidente puede ser de utilidad para su gobierno y para los candidatos afectos a su gobierno, pero no para la democracia, a la que su ambivalencia le hace gran daño», señaló.

«El presidente ya es candidato. Sus discursos y acciones son de un candidato presidencial. Aparte de invocar a Dios y tratar de echarle la culpa cuando lo juzgue la historia, lo cierto es que tenemos un presidente en permanente campaña», opinó el aspirante independiente y ex alcalde de Bogotá, Luis Garzón.

En contravía, Noemí Sanín, pre candidata por el oficialista Partido Conservador y ex embajadora del gobierno de Uribe, dijo confiar en la sinceridad de éste cuando habla de sentir «incertidumbre en el alma» frente a su eventual participación electoral.

Finalmente, la también candidata presidencial Martha Lucía Ramírez opinó que «el fortalecimiento de la democracia y de las instituciones es un asunto de los hombres y de las mujeres que tenemos una responsabilidad pública. No de Dios».