Cronica La Crónica

Olga Rocio, “amores que matan”

Olga Rocio Galindo es una joven mujer de tan solo 19 años de vida que llegó a la capital del país a buscar nuevas expectativa de vida, pero el destino le jugo una mala pasada al encontrarse con el hombre que intentó asesinarla con gasolina.

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Según Helena Galindo, una de sus dos hermanas, Olga Rocio, había terminado su bachillerato en la ciudad de Ibagué y un día tomó la decisión de venirse a vivir con Omaira, un a tía que vive en la localidad de Kennedy al sur de Bogotá

Después de conocer los hechos que rodearon este trágico hecho, helena, su hermana, no sale del asombro y aún no cree la situación y el estado en que se encuentra Olga Rocio.

Lo único que pide a las autoridades es que se haga justicia y que por ningún motivo, el hombre que atentó con tal sevicia y maldad contra su hermana no quede en las calles, buscando otra víctima para hacerle los mismos vejámenes a las que sometió a Olga Rocio por año y medio.

Lo que parecía ser una pareja ideal que convivía más de año y medio, terminó por convertirse en el más cruel intento de homicidio por parte del hombre que no resistió el hecho de terminar con su compañera sentimental, quien en estos momentos se debate entre la vida y la muerte, tras ser objeto del más pavoroso atentado que hayan hecho contra una mujer en el norte de Bogotá.

Olga Lucia Galindo compartió por más de un año y medio su vida sentimental con Ernesto Vásquez Flórez de 54 años, de edad, ingeniero civil, quien desde un comienzo le prometió el cielo y la tierra a la joven mujer de tan solo 19 años de edad, quien llegó a la capital para iniciar una sencilla, pero con el tiempo pasó a convertirse en una tormentosa y fatídica relación, señaló Ruby López, residente del conjunto residencia Portal de la Séptima, ubicado en la calle 186, de la localidad de Usaquén, donde se desarrollaron los hechos.

Después de recibir malos tratos y humillaciones, Olga Lucia Galindo decidió regresar a Ibagué, su ciudad de origen, pero debido a los insistentes llamados de su ex compañero, tomó la decisión que no correspondía.

Luego de rociarla con una mezcla de gasolina, aceite y ácido, como lo indicaron las autoridades de policía, el hombre le lanzó un fosforo y para que su macabro acto criminal tuviera más resultados, le lanzó una toalla impregnada con la misma mezcla a la cabeza y en cuestión de segundo la joven mujer se convirtió en una antorcha humana.

Todos los vecinos coinciden en que la actitud de Ernesto Vásquez Flórez era atentar y acabar con la vida de Olga Lucia, debido a que ella lo había dejado hacía dos meses atrás, indicó Jorge Ramírez, líder comunitario del conjunto.

Mientras que Olga Lucia Galindo era auxiliada por sus propios vecinos, su ex compañero ya había ideado por donde escapara, siendo alcanzado tres cuadras más adelante entre los vecinos, unos auxiliares bachilleres que se encontraban en el lugar y una patrulla de tránsito que a esa hora estaba regulando las vías sobre la carrera séptima.

Estupor y rechazo es el sentimiento de todos los vecinos que tuvieron que presenciar tan cruel acto, incluso trauma ha generado en los menores que se encontraba a esa hora jugando dentro del parque del conjunto.

Olga Rocio Galindo, cumplió 72 horas en esta Unidad hospitalaria y se espera que los siguientes días su condición cambie, ya que aún no se puede determinar si puede salvarse, en el evento que pueda salir de este trauma podría ser trasladada en un mes a la Clínica Fray Bartolomé de las Casas, a donde recibiría tratamiento especializado, señaló el doctor Federico Fernández, jefe de la Unidad de Quemados del Hospital Simón Bolívar

De acuerdo con la última valoración médica que se le practicó a la joven Olga Rocio Galindo, hospitalizada por las graves quemaduras que sufrió el pasado domingo tres de enero a las seis dela tarde, la paciente aún permanece en estado crítico, con asistencia mecánica e inconsciente, toda que ya se le practicó la primera cirugía que consistió en lavar y desinfectar toda la región afectada, para evitar posibles infecciones, en la medida que las horas pasen.

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