Cultura

Paolo, Big Popa, y Ángel Octavio en la gran final de Colombia tiene Talento

Tras una gigantesca búsqueda de talento por todo el país, Colombia Tiene Talento llega a su final. Tres actos por sus impresionantes habilidades llegaron a la última gala con la firme intención de llevarse el gran premio de 500 millones de pesos.

La noche de este jueves los tres finalistas presentaron su gala final. La decisión del ganador está en manos del público. Las líneas se cerrarán durante el programa y el acto que tenga la mayor votación se proclamará como el ganador de la primera versión de Colombia Tiene Talento.

Uno de los finalistas es Big Popa, quien es un caleño que representa el género urbano. El artista aseguró que el momento más difícil de su vida fue la enfermedad de su mamá, quién fue hospitalizada por diabetes.

De hecho, muchas de las historias de sus canciones, las ha sacado de su barrio, de sus vivencias con sus amigos, de sus conocidos. Además es promotor de seguridad en DESEPAZ (Desarrollo, Seguridad y Paz).

Otro opcionado es Ángel Octavio oriundo de Boyacá, allí vivió hasta los 8 años. Después vino a vivir a Bogotá y un tío le pagó una academia musical por tres meses. Pero a partir de allí todo lo musical lo aprendió de forma empírica.

Octavio, padre de 5 hijos, toda su vida ha tenido que trabajar en distintas cosas como vendedor, cocinero y hasta como minero en Muzo. Fue profesor en la casa de la cultura de Villanueva, Cesar. Vivió su infancia y juventud con sus abuelos y tíos. Sus papás los conocía hace poco; a su madre cuando tenía 21 años y a su papá en el 2011.

Y el artista que completa la terna es Paolo, quien es un pianista invidente, amante de la salsa vieja. La ceguera de Paolo se debe a que su madre sufrió rubeola en el embarazo. De pequeño veía un poco más; recuerda colores pero a la fecha ha perdido toda su visión.

Comenzó tocando con las ollas y luego realizó un curso de organeta. De ahí en adelante el talento lo desarrollo gracias a su disciplina. A los 13 años ya tocaba en orquestas y a los 18 se dedicó a estudiar Licenciatura en Música, pero no pudo continuar por falta de medios económicos.

En la actualidad Paolo ayuda económicamente a Paola, su novia, de quien fue su profesor.

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